El juez francés Nicolas Guillou, miembro de la Corte Penal Internacional (CPI), enfrenta sanciones impuestas por Estados Unidos desde agosto de 2025, tras autorizar la emisión de órdenes de arresto contra altos cargos israelíes acusados de crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad, esto de acuerdo al medio francés Le Monde.
Las medidas, dictadas por la administración de Donald Trump, afectan gravemente su vida personal y profesional, y han generado un debate global sobre la independencia de los jueces que investigan crímenes internacionales.
Las sanciones, prohíben a Guillou ingresar a Estados Unidos, pero su efecto trasciende las fronteras. El magistrado ha explicado que ha perdido acceso al sistema bancario estadounidense, lo que limita su capacidad de realizar operaciones financieras esenciales.
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Además, plataformas como Amazon, Airbnb, PayPal, Google, Microsoft, Visa o Mastercard bloquearon sus cuentas, y algunas reservas incluso fueron canceladas en Francia tras ser identificado como persona sancionada.
Guillou resumió la situación con una frase contundente: "Estás prácticamente prohibido bancariamente en buena parte del planeta".
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Presiones sobre la independencia judicial internacional
El juez sostiene que estas sanciones buscan intimidar a los jueces y fiscales de la CPI, sobre todo en investigaciones políticamente sensibles como los conflictos en Gaza, Ucrania y otras regiones. Según Guillou, las medidas constituyen un intento de interferir en la labor del tribunal y condicionar su autonomía:
“Las sanciones pretenden disuadirnos de cumplir con nuestro mandato de investigar crímenes atroces, sin importar quién los cometa”.
Actualmente, seis jueces y tres fiscales de la CPI, incluido el fiscal general Karim Khan, se encuentran bajo sanciones similares, evidenciando una escalada de tensiones entre Washington y la Corte con sede en La Haya.
Europa ante el desafío: mecanismos de protección judicial
Frente al alcance de las restricciones, Guillou ha instado a las instituciones europeas a activar mecanismos legales y diplomáticos que mitiguen el impacto de estas sanciones extraterritoriales. El juez considera que la Unión Europea debe garantizar que sus funcionarios y magistrados trabajen sin temor a represalias políticas:
“Proteger la independencia judicial es defender el Estado de derecho frente a presiones externas”.
Expertos en derecho internacional advierten que el caso de Guillou podría sentar un precedente peligroso si no se establecen salvaguardas claras.
A pesar del impacto de las sanciones y las limitaciones logísticas, Guillou asegura que los jueces y fiscales de la CPI continuarán cumpliendo su mandato con independencia, rigor y compromiso con las víctimas.
“Nuestra obligación es hacia las víctimas de crímenes atroces, no hacia quienes intentan restringir la acción de la justicia”.
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Guillou se pronuncia con respecto al caso durante el Congreso de la Unión Sindical de Magistrados
Durante el Congreso de la Unión Sindical de Magistrados (USM), el juez francés Nicolas Guillou, integrante de la Corte Penal Internacional (CPI), expuso en detalle las consecuencias de haber sido sancionado por el gobierno de Estados Unidos el pasado 20 de agosto. Guillou, quien preside la Sala de Cuestiones Preliminares sobre la situación en Palestina, advirtió que este tipo de medidas podría convertirse en una “amenaza global” para la independencia judicial.
El magistrado explicó que las sanciones estadounidenses, originalmente dirigidas contra terroristas, narcotraficantes y regímenes dictatoriales, alcanzan hoy a nueve jueces de la CPI. Entre los efectos prácticos mencionó el cierre de cuentas en empresas estadounidenses, restricciones bancarias severas, la imposibilidad de realizar transacciones internacionales y la revocación de visados de familiares.
Guillou subrayó que estas sanciones se extienden a aspectos cotidianos —como reservas de hotel o compras en línea— y pueden mantenerse indefinidamente, generando incertidumbre y presión psicológica. También alertó sobre el impacto en los familiares, que pueden enfrentar consecuencias legales incluso por ayudar en tareas básicas.
El juez llamó a desarrollar mecanismos jurídicos y económicos que limiten la extraterritorialidad de estas sanciones y pidió a los ciudadanos comprender que grandes empresas estadounidenses contribuyen a obstaculizar el trabajo de la CPI. Finalmente, defendió la importancia de una justicia independiente como pilar contra la corrupción y el autoritarismo.
Artículo creado con el apoyo de la IA
AJA