La administración del presidente Donald Trump ha intensificado su presencia militar en el Caribe, con el despliegue de un grupo de combate liderado por un portaaviones. En respuesta, el gobierno de Nicolás Maduro ha recurrido a Rusia, China e Irán para solicitar apoyo militar, según documentos obtenidos por medios estadounidenses. Esta dinámica revive tensiones geopolíticas con implicaciones para toda América Latina.
La carta a Putin: ayuda urgente
Según documentos obtenidos por The Washington Post, el presidente venezolano Nicolás Maduro habría enviado una carta a Vladimir Putin solicitando ayuda militar directa. Entre las peticiones destacan:
- Reparación de cinco radares rusos
- Mantenimiento de aviones Sukhoi Su-30MK2
- Adquisición de 14 misiles no especificados
Esta misiva se enmarca en un contexto de creciente presión militar por parte de Estados Unidos, que ha intensificado operaciones en la región.
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Estados Unidos moviliza su flota en el Caribe
El gobierno de Donald Trump desplegó el grupo del portaaviones USS Gerald R. Ford, acompañado por buques de guerra, un submarino nuclear y jets F-35.
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Esta operación es presentada por Washington como parte de su lucha contra el narcotráfico, aunque Caracas la interpreta como una amenaza directa a su soberanía.
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Rusia, China e Irán en el tablero
Además de Rusia, Venezuela habría activado contactos con:
- China, para acelerar producción de sistemas de radar
- Irán, para la entrega de drones de largo alcance
Estas acciones refuerzan el eje antioccidental que Maduro ha promovido como alternativa ante las sanciones y aislamiento de EU.
AJA