Estudiantiles y de profesores de dos planteles educativos despidieron a miembros de su comunidad que murieron a causa del estallido de una pipa cargada con gas LP cerca del puente La Concordia, en Iztapalapa.
En la escuela Preparatoria Oficial n.º 327 Chimalhuacán, los estudiantes recordaron al profesor Noe García, quien murió mientras se trasladaba a su otro trabajo, también como maestro en una secundaria técnica.
En Cuautitlán, integrantes de las escuelas de Ingeniería, Contaduría, Veterinaria, Agronomía, entre otras, se congregaron para dejar una flor en la coordinación de la carrera de Ingeniería en alimentos en memoria de Daniela Barragán, la estudiante de la UNAM fallecida en el mismo accidente.
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El profesor Noé García recibió un homenaje póstumo en la preparatoria donde impartía clases, tras perder la vida en la explosión de una pipa de gas en Iztapalapa. Compañeros, alumnos y exalumnos lo recordaron como un maestro comprometido, alegre y fundamental para la educación en la zona.
La ceremonia se llevó a cabo en la Escuela Preparatoria Oficial n.º 327 Quetzales, ubicada en la colonia San Vicente en Chimalhuacán, una colonia sin calles pavimentadas ni infraestructura sólida, pero que gracias a la gestión del profesor cuenta con este plantel.
Los estudiantes recuerdan que Noé García fue uno de los promotores con las autoridades de educación y el municipio para que se construyera la preparatoria en la colonia. Luego siguió los trámites para que se mantuviera el apoyo necesario para mejorar las instalaciones y el mobiliario.
“El maestro vive en cada alumno, en cada compañero”, expresó una docente durante el homenaje.
Por su parte, Fabiola González, directora de la institución, reconoció el esfuerzo del profesor: “La colonia es reciente, tiene al menos 10 años y el maestro, con esa visión de querer mejorar, siempre estuvo aquí con nosotros trabajando”.
Voces de gratitud
Los estudiantes dieron testimonio de la huella que dejó el docente. Ricardo confesó que, sin la paciencia de Noé, “seguiría reprobando”. Alberto lo recordó “alegre, sonriente y carismático”.
Exalumnos también compartieron su sentir. Inés Moreno, hoy licenciada en Turismo, relató que el profesor le prometió que la vería graduada: “La próxima vez que nos veamos va a ser con tu título”. Cumplió esa promesa dedicándole su tesis.
Flores, veladoras y recuerdos
Más de 300 personas se congregaron en la explanada de tierra del plantel. Cada estudiante llevó rosas blancas, que depositaron frente al edificio donde García impartía clases. También colocaron veladoras y un muñeco de croché en su honor, acompañado de una nota escrita por una alumna: “Cuando pienso en rendirme, recuerdo lo valiente que fuiste antes de irte al cielo”.
Conmoción en la UNAM
En el campus de la FES Cuautitlán de la UNAM, estudiantes y profesores colocaron flores, veladoras y mensajes de despedida homenaje a Ana Daniela Barragán; Evelin, compañera de aula, relató la manera en que sus compañeros se enteraron de la tragedia.
"Ver en la televisión la explosión y luego las pertenencias de mi compañera nos causó ansiedad y preocupación, es algo muy fuerte, algo que no te esperas”, dijo.
Agregó que junto con otros compañeros se movilizó en redes sociales y acudió a lugares cercanos para localizarla: “Rezaba y pedía que estuviera bien, que se salvara… ahora ya descansa, pero sí se siente ese vacío”, expresó Evelin.
En el edificio L del Campo 1 de la FES Cuautitlán, estudiantes, maestros y trabajadores colocaron ramos de flores, veladoras y fotografías de la joven. En pizarrones forrados con imágenes de la universitaria, los alumnos escribieron mensajes de despedida, oraciones y palabras de gratitud.
“La recordaremos como la futura ingeniera en alimentos que sería, por su calidad humana y extraordinaria persona”, compartieron sus compañeros en escritos.
El riesgo latente de las pipas de gas en México
En contexto: en México, los accidentes con pipas de gas LP han dejado múltiples víctimas a lo largo de los años. De acuerdo con reportes oficiales y hemerográficos:
Desde 2015 hasta la fecha se han documentado nueve siniestros graves con pipas de gas LP, con un saldo de 40 muertos y al menos 180 heridos en diferentes estados del país.
Entre los casos más recordados está la explosión en el Hospital Materno Infantil de Cuajimalpa (2015), que dejó ocho muertos —incluyendo recién nacidos y personal de salud— y 66 lesionados.
En San Juan Ixhuatepec, en 1984, se registraron una serie de explosiones en instalaciones de gas provocó la muerte de alrededor de 503 personas y miles de heridos.
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La Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA) es la instancia encargada de supervisar el transporte y distribución de gas LP, aunque especialistas advierten sobre fallas en la regulación, permisos irregulares y pipas que circulan sin seguro ni mantenimiento adecuado.
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