Acompañada de su hermana, Itzel Reyes recorrió varios hospitales en busca de su esposo, Osvaldo Gutiérrez, víctima de la explosión de la pipa de gas en el puente La Concordia.
Osvaldo tiene 28 años, es padre de tres niños menores de edad y el único sustento económico de su familia; el 10 de septiembre viajaba en una moto hacia su trabajo cuando el flamazo de la pipa de la empresa Gas Silza le quemó el 50% del cuerpo, especialmente en manos, pies y espalda.
Su hermana, Fanny, relató a La Silla Rota cómo se enteraron del accidente que sufrió Osvaldo. “Mi hermana se enteró porque un paramédico le llamó y le dijo que había estado en un accidente automovilístico, ella me marcó a mí y juntas nos fuimos desde allá, San Andrés Ahuayucan (Xochimilco) y antes de llegar nos llamaron para decir que estaba en la Clínica Hospital Emiliano Zapata”, relató Fanny sobre el accidente de su cuñado.
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Ciudadanos ofrecen apoyo a familias de víctimas
Osvaldo fue trasladado al hospital Magdalena de las Salinas, en el que ha encontrado la solidaridad de personas que, sin pedir nada, llevan una torta, una botella de agua, unas tortillas o palabras de aliento a las familias de las víctimas.
Otro aspecto que dice jamás va a olvidar es que un reportero le ofreció a ella y su hermana llevarlas al siguiente hospital donde trataban a Osvaldo.
“No sabe lo mucho que significó para nosotras, para mi hermana especialmente, y es algo que no vamos a poder pagar jamás”, dijo Fanny.
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María Hernández, junto con sus hermanas y su bebé de menos de un año, llevó pollo enchilado, arroz, tortillas y agua de Jamaica al hospital de Traumatología Magdalena de las Salinas del IMSS y se solidarizó con los familiares de las víctimas de la explosión en el Puente de la Concordia.
En entrevista con La Silla Rota, ella dijo que lo hace como un favor para pagar a San Judas Tadeo todo lo que le da en el año y que normalmente regala alimento el 28 de octubre, pero que decidió adelantarse para apoyar a las familias.
Ana Torres, psicóloga, acudió la mañana de este jueves al hospital Rubén Leñero, a ofrecer servicios de acompañamiento psicológico por parte de profesionales de salud mental.
“Promovemos una página de Facebook que se llama Barrio Colectivo de Iztapalapa, y ahí vamos a tratar de conjuntar las iniciativas de otras personas”, dijo.
Personal de la Policía Bancaria acudió también a hospitales de Iztapalapa para ofrecer comida, café y pan de dulce a las personas que pasaron la noche esperando noticias de sus familiares.
Hijos en ascuas
Iztel y Osvaldo tienen más de 13 años juntos, casi 10 de casados y tres hijos, uno en secundaria y dos en primaria. De acuerdo con Fanny, ambas familias han estado “al pie del cañón” con la atención a la salud de Osvaldo.
“Mientras esté vivo, tiene algo muy grande que hacer en la vida”, dijo Fanny sobre el estado de salud de su cuñado Osvaldo.
Fanny va a faltar a su trabajo el tiempo que su hermana la necesite, sin importar que le continúen descontando su salario.
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gph