Jocotitlán, Estado de México-. Manuel Velázquez encabezó el cortejo fúnebre de su hermana, María de la Luz Velázquez Hernández, una de las 10 víctimas del choque entre un autobús de transporte público y un tren, ocurrido en la autopista Atlacomulco-Maravatío.
El cortejo, realizado alrededor de las dos de la tarde en San Juan Cuajomulco, en el municipio de Jocotitlán, en el Estado de México, reunió a los deudos de María de la Luz, como sus 4 hijos, desolados, sus hermanos, pero también a sus vecinos, sus amigos y la gente del pueblo.
El cortejo fue escoltado por una patrulla, unos cargaban el féretro, otros cargaban un cuadro con la foto de María de la Luz, algunos dolientes llevaban flores entre sus manos, unos más encendían cuetes como señal de luto, y un mariachi tocaba lánguidamente Amor Eterno, himno del dolor y luto por la pérdida de un ser querido.
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Su hermano Leonel Velázquez compartió con La Silla Rota su sentimiento.
“Es una pérdida que duele en el alma”.
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La casa de María de la Luz tenía en su puerta un cartel para informar que el novenario de rosarios comenzó el 9 de septiembre y la misa sería este 10 de septiembre al mediodía.
Luego de la misa en la iglesia los dolientes partieron al panteón, a unos pasos de la casa de María de la Luz. Ahí las lágrimas sustituyeron los rostros solemnes. Era el último adiós a María de la Luz, una mujer trabajadora y que aunque enfrentara problemas, no perdía la capacidad de reír, describió su hermano Leonel.
Ese día salió tarde y por eso tomó el camión
María de la Luz trabajaba en la Ciudad de México, como empleada doméstica, y se quedaba en la capital de lunes a viernes. Por eso, cada lunes salía desde San Juan Cuajomulco. Acostumbraba tomar un taxi colectivo que la llevara a Atlacomulco y de ahí dirigirse a la ciudad.
Pero el lunes 8 de septiembre salió unos minutos tarde y ya no alcanzó el colectivo, por lo que debió tomar el camión de dos pisos, recordó su hermano Leonel.
“Mi sobrino la fue a encaminar a la terminal, y pues él sabía que en qué unidad se había ido. Cuando supieron del accidente entonces desde ese momento empezaron a buscarla en los hospitales de aquí de la región de San Felipe del Progreso, de Atlacomulco, de Izcalli”, relató esas primeras horas luego de que supieron del accidente.
“Desafortunadamente no estaba en esa lista o afortunadamente no, pero todos los familiares empezaron a llamarle, pero pues todos los mensajes se iban a buzón, siempre a buzón”, continuó.
Entonces supusieron que al no estar en la lista de los lesionados estaba en la otra lista de los fallecidos.
“Mis sobrinos que estuvieron buscando todos los hospitales, y al final de cuentas fueron a la fiscalía y ya fue donde sea, no sé si le dieron la noticia o no sé, pero pues ahí fue como se enteraron”.
Fue una imprudencia
Actualmente, en el sitio donde ocurrió el accidente ahora se ve a policías dar indicaciones en ambos sentidos. Pero tal como se vio en videos y como se quejan habitantes de la región, no hay plumas que detenga el tránsito cuando se acerca el tren.
Eso es algo que también mencionó Leonel, además que el vehículo avanzó inexplicablemente y que causa que se atraviese, lo que forma parte de los pendientes que deben explicarse para deslindar responsabilidad, como la empresa que operaba este camión.
“Esto a mí se me hace una imprudencia”. Por eso, para él, el caso no está cerrado y todos los dolientes quieren justicia.
Ahora hasta hay policías
Don Beto es un taxista que ha recorrido la autopista Atlacomulco-Maravatío desde que fue inaugurada por el entonces gobernador Arturo Montiel.
Recordó que no es el primer accidente de ese tipo y que hace 4 años otro auto salió disparado por el tren, luego de que su chofer se durmió.
Pero también remarcó que nunca ha habido plumas para detener el tráfico al paso del tren.
Por eso es que le da risa que desde el 8 de septiembre hay presencia de policías con banderas para dar indicaciones.
“Antes había patrullas pero no bajaban”, criticó.
Contexto del accidente
Boletín
La Secretaría de Salud del Gobierno del Estado de México informó el 9 de septiembre que 34 personas (24 mujeres y 10 hombres) fueron dadas de alta médica, mismas que recibieron atención inmediata en los diversos hospitales de la entidad.
Cabe señalar que se sigue atendiendo a 23 personas que continúan hospitalizadas en diversos nosocomios por fracturas, golpes y heridas; 13 de ellas se encuentran estables y 10 se reportan como graves al necesitar una o más cirugías, dependiendo del avance en su salud.
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Durante las últimas horas dos personas más acudieron a hospitales de la región por sus propios medios para ser atendidos por diversas dolencias, sumando un total de 57 personas lesionadas en este siniestro.
Finalmente, es preciso referir que la cifra de personas fallecidas se mantiene en 10, 7 de ellas mujeres y 3 hombres.
VGB
