A 15 días de que el agua arrasó con todo a su paso en las colonias Azteca y Progresista, en la alcaldía Venustiano Carranza, decenas de familias siguen esperando los apoyos económicos que la jefa de Gobierno, Clara Brugada, prometió entregar de inmediato.
Las viviendas fueron censadas, se colocaron calcomanías de colores según el nivel de afectación y las autoridades aseguraron que cada familia recibiría un cheque de entre 5 mil y 25 mil pesos. Sin embargo, hasta hoy, varias vecinas denuncian que las ayudas no han llegado.
“No estamos pidiendo limosna”, dice Erika Rodríguez, en entrevista con La Silla Rota. “Perdimos nuestras cosas, fuimos censados, tenemos evidencia. Lo que queremos es que cumplan con lo que prometieron”.
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En las calles todavía se acumulan restos de muebles hinchados por la humedad. Los muros guardan la marca del agua, que en algunos hogares alcanzó más de un metro. Los testimonios de las vecinas coinciden que, mientras algunas familias ya recibieron recursos, otras fueron excluidas sin explicación, a pesar de que sus casas fueron censadas y etiquetadas como rojas o naranjas, las categorías de mayor daño.
“Nos traen vuelta y vuelta”
Erika, maestra y vecina de la calle Chiclera, recuerda con frustración el proceso.
“Yo fui una de las afectadas de las lluvias del 10 de agosto y hasta ahora no he recibido nada. Nomás puras promesas. Vinieron, tomaron fotos, grabaron videos, vieron todo lo que se echó a perder: mi refrigerador, mi estufa, mi cama, ropa, trastes. Y hasta ahorita nada. Me dijeron que asistiera al evento donde iban a entregar los apoyos, fui, y a la mera hora me dijeron que no, que iba a salir hasta la siguiente semana. Y así nos traen, vuelta y vuelta”.
La maestra, de 55 años, asegura que incluso ha visto casos de personas que no fueron afectadas y sí recibieron dinero. “¿Cómo les dieron dinero a esas personas si supuestamente debía haber evidencias de lo que perdieron? No es justo”, reclama.
La desesperación crece
A unos metros, en la colonia Progresista, Araceli Jiménez muestra la puerta de su casa marcada con calcomanía naranja, señal de daño medio. El agua le llegó hasta la cintura, afirma.
“Hasta el momento no he recibido ayuda, solo una despensa y un kit de limpieza. Clara vino, dijo que esa misma semana iban a pasar a entregarnos, pero nunca llegaron. Perdí mi refrigerador, estufa, lavadora, mis pantallas, todos mis muebles. Lo único que recibí fue un colchón y gracias a eso tengo dónde dormir”, relata.
Araceli dice que la paciencia en la comunidad se agota. “Unos vecinos dicen que vamos a volver a cerrar la vialidad, otros que vamos a ir hasta el Zócalo a buscar a Clara. Somos como 40 los que todavía no recibimos nada”.
Promesas incumplidas
El caso de María del Carmen Velasco es similar. Su casa fue clasificada también con calcomanía naranja. Perdió sala, comedor, lavadora, refrigerador y hasta la comida de su mascota.
Ella, como sus vecinas también asistió al evento de Clara Brugada el 16 de agosto, en el que prometió ayuda económica a los afectados; sin embargo, afirma, “nunca nos han dado nada, ni apoyo ni despensa”.
“Estuve en el evento de la jefa de Gobierno y me dijeron que no salía en la lista, que iban a volver a hacer la encuesta. Dejé de trabajar dos semanas esperando una respuesta y no llegó nada”, asegura.
“Nos sacaron de la lista”
Otro caso es el de la señora Ruth Velasco Hernández, vecina de la colonia Azteca, quien afirma que un día antes de la entrega oficial de los cheques de apoyo, personal del gobierno la censó y le aseguró que estaba registrada.
“Cuando fue el evento resulta que no estábamos en la lista. Un día antes sí, y al otro día ya no. A mis vecinos algunos sí les dieron, entre 5, 10 y hasta 25 mil pesos, dependiendo de lo que perdieron. Yo perdí estufa, refrigerador, sala, comedor. Y aparte he perdido días de trabajo pidiendo permiso para estar aquí, esperando al gobierno que nunca llega”.
El discurso oficial
El 16 de agosto, Clara Brugada visitó a los afectados por las inundaciones de las alcaldía Venustiano Carranza. Ahí, después de visitar las casas de algunos vecinos, prometió una respuesta inmediata y apoyos económicos “extra al seguro” contratado por el gobierno, además de despensas, colchones y comedores comunitarios.
“Ya están preparados para hacer la entrega de estos apoyos y solo hay casos especiales que también se están tomando en cuenta. Esto es para recordarles que no están solos”, dijo la mandataria.
La Secretaría de Bienestar informó ese mismo día que se repartirían 362 cheques en las colonias afectadas, además de despensas, kits de limpieza y raciones de comida. Sin embargo, en Azteca y Progresista hay decenas de familias que aseguran no haber recibido nada.
La Silla Rota consultó a la Secretaría de Bienestar e Igualdad Social (Sebien), encargada de la entrega de los apoyos, sobre estos casos e indicaron que “si eso ocurre”, los afectados deben comunicarse a los teléfonos de la Secretaría “para verificar sus datos y en su caso poder asistirles”.
Entre la incertidumbre y la indignación
En tanto, en calles como Chiclera o Pirotecnia, donde aún se ven salas desechas, maderas hinchadas y ropa apilada esperando a ser retiradas, decenas de vecinas insisten en que el apoyo nunca llegó.
Y entre más tiempo pasa, la desconfianza hacia el gobierno crece. “No es limosna, es lo que nos corresponde por lo que perdimos”, dice Erika con firmeza.
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CONTEXTO: El 10 de agosto, una tormenta colapsó el drenaje en varias colonias de la Venustiano Carranza. Días después, la jefa de Gobierno, Clara Brugada, acudió al lugar. Frente a los vecinos aseguró que se entregarían apoyos inmediatos de 5 mil pesos a quienes tuvieron daños menores, 10 mil para afectaciones medias y 25 mil para quienes lo perdieron casi todo. A la par, dijo, entraría en funcionamiento un seguro contratado por la ciudad para complementar las compensaciones.
lrc