Migrantes que ocupan el campamento localizado en Avenida de los 100 Metros, cerca de la Central Camionera del Norte, logró detener el desalojo del sitio gracias a una suspensión que les concedió un juez federal.
La suspensión no significa que se impida la reubicación de los migrantes, sino que las autoridades locales deberán llevar a cabo en acuerdo con ellos, de manera planificada y voluntaria.
Ante la advertencia de que serían desalojados que hicieron las autoridades de la Ciudad de México. migrantes solicitaron un amparo al juzgado décimo de distrito en materia administrativa del primer circuito con sede en la capital del país.
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Con la asesoría del Instituto Federal de Defensoría Pública, 91 migrantes pidieron que no se cumplan las advertencias que hicieron trabajadores del gobierno de la Ciudad, quienes desde febrero anunciaron que se les desalojaría y que deberían aceptar, de lo contrario, el Instituto Nacional de Migración se haría cargo de la evacuación.
Contexto: El 12 de marzo, autoridades de la CDMX acudieron al campamento y anunciaron a los migrantes que deberían desalojar. A algunos se les envió a un albergue en Tepito planeado para recibir a personas que viven en la calle, pero otros se negaron a salir y se les advirtió que si otra instancia se ocupaba del desalojo la situación sería peor.
El juez ordenó que no se lleve cabo el traslado hasta que los migrantes acepten el traslado y se les lleve a albergues temporales en los que se respeten sus derechos humanos.
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El IFDP informó que desde el 2023 ha realizado acciones en favor de los migrantes contra los desalojos forzosos de campamentos y ha promovido diversos juicios de amparo para que en la reubicación se respeten sus derechos humanos y se les brinde transportación y alojamientos temporales adecuados.
Tres años junto a las vías
El campamento de migrantes conocido como "el de las vías" se ubica en la calle Clave de la colonia Vallejo, desde hace aproximadamente tres años.
Está conformado, en su mayoría, por personas de origen venezolano, colombiano y haitiano.
Los extranjeros se establecieron a ambos lados de las vías del tren debido a que a unos metros se encuentra el albergue Cafermin, que no pudo alojar a todos los que llegaban en búsqueda de un espacio mientras seguían su camino hacia la frontera entre México y Estados Unidos.
Quienes no eran recibidos en el albergue comenzaron a establecerse en casas de madera que los extranjeros llaman "ranchitos".
Dese el año pasado, los migrantes obtuvieron una suspensión provisional contra un desalojo y hace semanas que comenzaron los operativos para trasladarlos a algún refugio de la Ciudad de México colocaron copias del amparo en las entradas de las casas improvisadas.