“Se hizo justicia, hay evidencias de las irregularidades que cometieron, es un proceso que continúa abierto, ya quitaron los sellos, pero la investigación sigue”, dice Armando Mohacid Esquivel García, propietario de la barbería “Catrin Barber Shop”, clausurada durante el operativo “Atarraya”.
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Su establecimiento contaba con cámaras de seguridad, esas grabaciones mostraron como los elementos que participaron en el cateo de “Atarraya” sembraron las presuntas evidencias de delitos en esta barbería ubicada en la delegación de Santiago Miltepec, al norte de Toluca.
La Silla Rota, acudió a la barbería de Armando Mohacid. Platicó que hace tres años decidió abrir su propio negocio, pero nunca imaginó que un día llegarían decenas de policías y elementos de la Guardia Nacional, para catear su fuente de trabajo, que está dentro del domicilio de su familia, una casa de dos niveles que en la planta baja es “Catrín Barber Shop”.
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“Atarraya”, un trago amargo
Comentó que realmente fue “trago amargo”, una experiencia difícil, porque cerraron y clausuraron la barbería señalando que había droga, y delitos que perseguir, “afortunadamente las cámaras grabaron la evidencia y se dio el apoyo de los vecinos, mis clientes, se dio el diálogo y ya abrimos nuevamente, pero si fue un trago amargo”.
Recuerda que antes de poner su barbería, durante 23 años trabajó en restaurantes y bares, llegó a ser capitán de meseros y jefe de servicios, actividad que combinaba con aprender el arte de la barbería, un oficio que le enseñó una conocida y luego decidió estudiar.
Compartió que el cambiar totalmente de giro para ser barbero, “fue una decisión de la noche a la mañana porque ya me había cansado el horario que venía manejando. Una persona hace como 15 años me enseñó el oficio, esta persona era estilista y esta persona me enseñó a hacer los cortes de hombre, uñas, cejas, todo, trabajé con ella casi dos años y lo dejé”.
Su familia lo impulsó a ser Barber
Agregó que, con el paso del tiempo, tuvo la necesidad de retomar la barbería y se fue a una escuela por ocho meses para actualizarse y graduarse como Barber.
Una vez que se casó, su esposa Judith, le ofreció poner su propio negocio en su casa, y actualmente tiene el proyecto de crecer a mediano plazo, quiere contratar a otra persona para que atienda a las damas que acudan a ponerse su tinte de cabello, sus uñas, pestañas o peinado elegante, pues el sólo no se daría abasto.
“La ventaja que tengo es que abro desde las nueve hasta las nueve de la noche. La idea es que más adelante, conforme vaya creciendo un poquito más, ofrecer el servicio a mujeres, yo no podría hacerlo, sí sé hacerlo, pero o atiendo a uno o atiendo a otro”, argumentó el barbero.
“El Catrín Barber Shop”, apapacha a los clientes
De acuerdo con “El Catrín”, como popularmente se le conoce en Toluca, la gente de su entorno social es amigable y, en respuesta, les ofrece su corte de cabello gratis el día de su cumpleaños, sólo por ser clientes frecuentes durante el año.
“En la calle me conocen como Catrín, que es el nombre de la barbería y pues es bonito, se siente padre de que cada vez que sales te identifiquen. Tengo una cartera como de 60 personas que son constantes. De hecho, yo manejo tarjetas de cliente frecuente, me llegan seis y el sexto es corte gratis y en su cumpleaños de los clientes frecuentes mi regalo para ellos es no cobrarles el corte”, el servicio que brinda le permitió contar con el respaldo de los vecinos tras la clausura de su barbería.
Mencionó que, de su clientela, el 70 por ciento son jóvenes, señores y en menor proporción adolescentes, aunque también predominan los niños de las escuelas cercanas.
“Trato de distraerlos, ¡mira! Esta es la máquina, no pasa nada, te voy a echar agüita, ten un dulce, tengo cosas para poderles prestar y la pantalla para exponer películas, el fin semana con los niños parece guardería aquí y no tengo cómo distraerlos, les pongo la película o las caricaturas y ya”, explicó.
Armando Mohacid Esquivel García, tiene 51 años, dice que su negocio ya está acreditado, “aunque sí, posiblemente fue estigmatizado por algunas personas luego del desarrollo del operativo “Atarraya” que fue el viernes pasado”.
Su denuncia generó baja de dos agentes
Permaneció clausurado hasta el martes, día en que la Fiscalía General de Justicia del Estado de México retiró los sellos de asegurado a esta barbería y otros establecimientos que intervino con la Guardia Nacional, presumiendo que en las 312 aseguradas se “fraguaban” delitos de alto impacto.
Armando presentó una denuncia por la siembra de los presuntos ilícitos, contaba con los videos que lo respaldan y como resultado no sólo le permitieron reabrir, sino que además fue retiró del cargo al comandante y ministerio Público que iban al frente de la diligencia efectuada en la delegación de Santiago Miltepec, al norte de la ciudad de Toluca.