Un grupo de personas, varias de ellas jóvenes, realizaron una movilización este sábado 8 de noviembre de 2025 en la Ciudad de México, para protestar por la violencia en el país.
Los manifestantes intentaron avanzar desde el Ángel de la Independencia hasta el Zócalo capitalino, pero el recorrido fue interrumpido por un operativo policial que impidió el paso de los participantes en la zona de Eje Central y 5 de Mayo.
Los manifestantes, en su mayoría jóvenes, decidieron no confrontar a las autoridades y retrocedieron hasta el Hemiciclo a Juárez. Ahí realizaron una concentración pacífica, desde donde pronunciaron mensajes en los que insistieron en que su intención era mantener la calma y ejercer su derecho a protestar sin violencia.
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Durante la lectura de su posicionamiento, el grupo señaló que su movilización no pretendía generar disturbios. El lema principal de la jornada fue “¡Queremos paz para México!”.
Exigen seguridad y denuncian omisión oficial
La protesta congregó a alrededor de cien personas que exigieron mayores condiciones de seguridad en el país. Los manifestantes afirmaron que la situación de violencia afecta a comunidades enteras y acusaron falta de respuesta gubernamental ante los casos recientes de agresión.
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Entre las consignas se mencionó el asesinato del presidente municipal de Uruapan, Carlos Manzo, ocurrido días antes, al que atribuyeron como ejemplo del riesgo que enfrentan autoridades locales frente al crimen organizado. También se escucharon frases contra el partido Morena y llamados a reformar el sistema político.
Integrantes del autodenominado movimiento Generación Z México precisaron que su papel fue de acompañamiento y respaldo al descontento ciudadano. Expresaron que la movilización debía mantenerse pacífica y apartada de actos violentos o partidistas.
Reacciones del gobierno y críticas a la convocatoria
Previo a la movilización, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo calificó la convocatoria como una acción impulsada por grupos empresariales y organizaciones civiles. La mandataria consideró que esos sectores buscaban influir en los jóvenes y distorsionar el sentido de la protesta.
Sheinbaum expresó que su gobierno respeta el derecho a la manifestación, pero señaló que el movimiento del 15 de noviembre —fecha original de la convocatoria— no contaba con bases legítimas. Además, reiteró su disposición a someterse a un proceso de revocación de mandato, al que definió como un instrumento constitucional.
Legisladores federales también intervinieron en el debate previo, exhortando a los jóvenes a no usar políticamente el caso de Carlos Manzo ni promover enfrentamientos.
Marcha anticipada y repliegue ordenado
La manifestación se adelantó una semana respecto a la fecha inicial y partió cerca de las 11:00 horas desde el Ángel de la Independencia. La ruta establecida tenía como destino final Palacio Nacional. Sin embargo, el operativo de seguridad impidió que los contingentes llegaran a la plancha del Zócalo.
El cierre de calles en el perímetro central llevó al grupo a reorganizarse. Los asistentes se desplazaron hacia el Hemiciclo a Juárez, donde continuaron las consignas. La concentración concluyó sin incidentes mayores y sin presencia prolongada de las fuerzas de seguridad.
Con este bloqueo, la movilización de Generación Z México no alcanzó su objetivo de ingresar al centro político del país. Los participantes mantuvieron la postura de no provocar enfrentamientos y de insistir en el reclamo por condiciones de seguridad y respeto a la libre manifestación.
VGB