Durante siete años, Teresa Cruz y Rita García vecinas de Iztapalapa libraron una batalla contra la alcaldía, que insistía en negar la existencia de un basurero en la calle Flor Marina, en la colonia Santiago Acahualtepec. Hoy, tras años de denuncias, gestiones y recursos legales, ganaron la lucha definitiva, luego de que un tribunal confirmó que el tiradero existe, reconoció la omisión de las autoridades y ordenó limpiar la zona, además de implementar un programa formal de recolección de residuos.
El Cuarto Tribunal en Materia Administrativa del Primer Circuito desechó el recurso de revisión que la alcaldía presentó en junio pasado, luego de que un juez de distrito fallara a favor de las denunciantes. Además, determinó que la impugnación era inválida, pues fue presentada por un funcionario sin facultades legales para hacerlo.
El fallo pone fin a una larga disputa en la que las vecinas documentaron la acumulación constante de desechos, fauna nociva y olores fétidos frente a sus viviendas, sin que la autoridad respondiera.
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“No tenían facultades para apelar”: abogado de las vecinas
En entrevista con La Silla Rota, Alejandro Martínez, abogado del Consejo Nacional de Litigio Estratégico y representante legal de las vecinas, explicó que además el tribunal no sólo confirmó la sentencia original, sino que desechó la impugnación por un error procesal de la autoridad.
“Se desechó el recurso de la alcaldía porque quien lo presentó no tenía las facultades legales para hacerlo”, detalló. El defensor precisó que el tribunal revisó el fondo del asunto y confirmó que existe una irregularidad en la recolección de basura y que la autoridad debe cumplir con la sentencia.
De acuerdo con el abogado, los magistrados ratificaron la resolución emitida en junio pasado, en la que se ordena a la alcaldía garantizar el servicio público de limpia en todas sus etapas —barrido, recolección, transferencia y tratamiento— en la calle Flor Marina.
También deberán instalar un sitio adecuado para el depósito y separación de residuos dentro de la colonia, elaborar un programa que establezca rutas, horarios y frecuencia de recolección, y difundir entre los vecinos las sanciones por tirar basura, promoviendo, al mismo tiempo, la participación ciudadana en el manejo responsable de los desechos.
“Ya no les queda más que acatar la resolución. Se acabaron los recursos y las excusas”, afirmó Martínez. Explicó que el juzgado exigirá pruebas concretas de cumplimiento, como evidencia de las labores de limpieza, de las acciones informativas hacia los ciudadanos y de la instalación del nuevo punto de depósito, todo lo cual deberá acreditarse dentro del expediente.
La sentencia será publicada en los próximos días, tras lo cual el juzgado de origen ordenará a la alcaldía cumplir de inmediato con las medidas establecidas. “A partir de ahí veremos si realmente limpian o si continúan simulando”, advirtió el abogado.
Martínez calificó la resolución como “una victoria ciudadana y simbólica”.
“Son señoras de la tercera edad que durante años tocaron puertas sin respuesta. El tribunal las escuchó. Esto demuestra que el Poder Judicial puede ser cercano a la gente”, dijo.
El abogado adelantó que preparan una campaña de difusión para replicar este modelo de litigio en otras alcaldías.
“Queremos mostrar que sí se puede exigir que el gobierno cumpla, sin que eso tenga costo para los vecinos”, añadió.
“No hay basurero, sólo punto de vaciado”, alcaldía Iztapalapa
Consultado respecto a esta última resolución, Alfonso González May, director general de Servicios Urbanos de la alcaldía Iztapalapa, aseguró que aún no han sido notificados oficialmente y reiteró su negativa de que exista un “basurero clandestino” en el sitio.
“Ya no hay tiradero ahí. Lo que existía era un punto de vaciado temporal, donde llegaban los carritos de basura para vaciar al camión y se limpiaba después”, explicó.
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El funcionario reconoció que el punto fue trasladado dos calles más adelante para evitar conflictos mientras continuaba el litigio.
“Algunos vecinos nos han pedido que regresemos ese punto, pero no es posible por el litigio”, añadió.
González May argumentó que la alcaldía mantiene las labores de recolección y limpieza en la zona, aunque considera que instalar contenedores podría generar focos de infección.
“Si la resolución lo ordena, los instalaremos, pero no necesariamente es la mejor idea”, dijo.
Respecto a la definición de “basurero”, el director refirió que llegar con los carritos y vaciarlos en el camión no se puede considerar un tiradero clandestino.
Siete años de lucha
El conflicto comenzó en 2017, cuando Teresa Cruz y Rita García, vecinas de la Segunda Ampliación Santiago Acahualtepec, denunciaron la acumulación constante de basura en la esquina de Flor Marina y Primavera.
Durante años documentaron la situación con fotografías, oficios y denuncias ante la propia alcaldía. Ante la falta de respuesta, promovieron un amparo indirecto que derivó en la sentencia favorable que hoy quedó firme.
Las mujeres, ambas adultas mayores, siguieron en vivo la sesión del tribunal que confirmó su victoria.
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