La Ciudad de México se muere de sed. El gobierno capitalino encontró la solución temporal de enviar pipas de agua a las zonas con mayor desabasto; sin embargo, esta práctica se ha vuelto casi permanente y poco sostenible. En 2024 el agua entregada a las pipas en regla cayó 43% con respecto al año pasado.
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La Silla Rota solicitó al Sistema de Aguas de la Ciudad de México (SACMEX), mediante petición de información, un desplegado de la cantidad de litros de agua que cada una de los 34 pozos de agua a las pipas oficiales despachó por día durante los últimos siete años.
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Huipulco, ubicada en Tlalpan, es el tubo de agua (también conocido como garzas) que más líquido distribuye diariamente en la Ciudad de México, con 8 millones 262 mil 481 litros diarios durante los últimos siete años. Mientras que Casso en la Álvaro Obregón no ha surtido ni una sola gota de líquido en el mismo lapso de tiempo.
Sin embargo y a pesar de no operar, esta infraestructura operada por SACMEX está resguardada por elementos de la Guardia Nacional y seguridad privada que vigilan el perímetro del pozo y toman los datos de quienes se acercan a él.
Álvaro Obregón: Casso, el pozo que no tiene agua
Dentro de un muro gris con líneas azules se encuentra la garza que no ha dado un sólo litro de agua en siete años. Por fuera no se ve una toma cuello de garza de la que las pipas puedan surtirse y a la entrada hay tres personas: dos elementos de la guardia nacional vestidos con uniforme y un señor mayor de seguridad privada.
Para intentar ver el edificio de cerca es imperativo ir con el hombre de seguridad privada que solicita: nombre, cargo y motivo por el que la persona quiere acercarse a la puerta. Anota visita como motivo de entrada al lugar.
La puerta de metal donde se accede a ver el pozo, sin garza, está a 10 pasos de donde solicitan datos. Dos elementos de la Guardia Nacional cuidan la puerta abierta, al fondo se ve una tubería azul celeste bastante gruesa y oxidada en los remaches.
Se cuestionó al personal que resguarda el lugar si han visto que se surta agua desde el sitio, y la respuesta fue negativa.
“No. Nomás estamos cuidando, no puede ingresar personal que no traiga identificación, los vigilamos. Somos varios los que estamos, tomamos nota de quién entra y el vehículo que viene. Nosotros informamos y ya”, respondió el personal que vigila la zona.
La Silla Rota solicitó una postura a SACMEX sobre el caso. Hasta la publicación de este material no hubo una respuesta sobre por qué este lugar está listado como una garza si no existe tal, y por qué es resguardado por elementos de la Guardia Nacional y seguridad privada.
Tlalpan: Huipulco es la garza #1 de las 16 alcaldías que da más agua a pipas
De las 34 garzas registradas como oficiales en la Ciudad de México, Huipulco es la que más agua da. Se encuentra a escasos pasos de la estación del tren ligero con la que comparte el nombre.
Este sitio cuenta con dos garzas, ubicadas en avenida Acueducto sin número entre San Juan de Dios y Arenal, son alimentadas por un pozo que SACMEX rehabilitó hace no mucho y que está conectado a la red de agua que va de Xochimilco hasta la colonia Reloj en Coyoacán.
Los camiones tipo pipa se estacionan fuera del sitio y con ayuda de Alfredo Hurtado, uno de los supervisores del lugar, conectan un “gusano plástico negro” al cuello de la toma garza, que ayuda a conducir el agua dentro del camión.
Al día, de 10 a 12 pipas pasan a cargar agua en estas garzas. Alfredo se encarga de bombear el agua de la toma principal a las garzas, usando botones dentro de una caseta especial. Cada litro de agua bombeado dentro de las pipas es registrado por un medidor azul nuevo que SACMEX instaló hace menos de 5 meses.
A la par del medidor también instalaron cámaras de seguridad que vigilan el trabajo de Alfredo, los piperos y sus compañeros. Él opina al respecto lo siguiente:
“También otra cosa, pusieron en las garzas estas cámaras. Ya estamos peor que en el reclusorio por tanta cuidado que nos ponen. ¡Está bien! ¡Adelante! Pero siento que también es para nosotros una ofensa”.
Las cámaras y medidores de agua se instalaron para prevenir el huachicoleo de agua, que en los últimos años ha sido una problemática común por la falta de agua en la Ciudad de México y la creciente demanda de los pobladores en las periferias.
La crisis hídrica de la Ciudad de México
Ciudad de México tiene más de 12 en una crisis hídrica que crece cada año apoyada en la falta de lluvias, el cambio climático, la explotación de la industria, el crecimiento de población, la falta de mantenimiento de los sistemas y la mediocre gestión del recurso.
La administración de la Ciudad de México no ha reconocido plenamente la crisis hídrica que provoca el estrés y abuso del recurso en el país, sin embargo a mediados del 2010 el gobierno de la capital reconoció la existencia de “problemáticas” del agua y comenzaron programas para gestionar de una manera más inteligente el recurso.
En 2020 SACMEX implementó el Programa Estratégico para Garantizar el Derecho al Agua (2020-2024) que se compuso de una inversión de 19 mil 964 millones de pesos en programas de monitoreo de fugas, programas de reparación exprés de tuberías, optimización de pozos y sistemas de abastecimiento.
Desde el 2019 los poco más de 9 millones de habitantes de la Ciudad de México viven una crisis hídrica que poco a poco reseca los subsuelos, priva de agua potable a los habitantes y ante esto el gobierno de la CDMX junto con la Secretaría de Aguas de la Ciudad de México (SACMEX) no dio respuesta.
¿De dónde viene el agua de las pipas?
Los pozos de donde se toma el agua para llenar las pipas, se alimentan de lluvia y demás tipos de precipitación, así como del agua que subterráneamente se arrastra desde las sierras hasta llegar a los mantos acuíferos de la zona del valle de México. Así lo indica la investigadora Alejandra Cortes Silva, Técnica Académica Titular C del Instituto de Geofísica de la UNAM.
“Depende de la lluvia, porque finalmente toda la recarga (de pozos profundos) es a través de la lluvia local y de las principales sierras, por ejemplo la Sierra de Las Cruces y la Sierra de Chichinautzin… Al momento de pasar por los barros, basaltos y limos el agua se va filtrando, permeando, hasta llegar a cavidades subterráneas donde no hay más luz ni oxígeno lo que impide que algunos bichos o bacterias se desarrollen.” Alejandra Cortés Silva
Ciudad de México es un lugar en donde el calor aumenta año con año, mientras que la época de lluvias disminuye; gran parte de esto tienen que ver con los efectos del cambio climático y las actividades humanas.
Los pluviómetros de la ciudad registran anualmente 38.14 milímetros cúbicos de agua al año.
Además de encontrar que la cantidad de agua surtida cayó poco más de 40% en el lapso de 12 meses, se encontró que en la alcaldía Álvaro Obregón hay una toma tipo garza que no ha surtido una sola gota de agua en siete años: Casso.
Mientras que en Tlalpan e Iztapalapa están las garzas que más agua surten a la población.
¿Qué es el Día Cero?
Se conoce como Día Cero al momento en que una ciudad ya no es capaz de proveer de agua potable suficiente en calidad y cantidad a sus habitantes.
Esto deviene usualmente de la sobreexplotación de los mantos acuíferos, la falta de lluvias, y las olas de calor intenso que provoca sequías, que ha llevado a que las presas estén a en mínimo nivel, lo que ha disparado las alarmas.
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