El temor y la desconfianza de recibir agua contaminada a través de la red de suministro ha llevado a un grupo de vecinos de la zona norte del municipio de Nezahualcóyotl, en el Estado de México, a dejar de bañarse, no limpiar sus viviendas y hasta dejar de lavar trastes, durante tres días consecutivos.
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“Prefiero dejar de lavar, a que me pase algo, porque dicen que es gasolina la que está en el agua, porque sigue oliendo y mejor no nos hemos bañado”, explica Jessica, una joven que vive en la calle 11.
El temor surgió desde la noche del jueves pasado cuando autoridades de seguridad pública de Nezahualcóyotl, agentes de la Guardia Nacional y personal de Pemex atendieron una presunta toma clandestina de hidrocarburo en la colonia Campestre Guadalupana.
La conexión ilegal fue detectada sobre la avenida de Las Torres, justo en el cruce de la calle 11, donde vive Jessica con sus padres y hermanos desde hace más de 30 años.
“Sí había veces que como que olía a gasolina, pero pensábamos que era algún carro o algo, pero ya nos dimos cuenta el jueves en la noche que era mucho y que ya había muchas patrullas en la esquina de la calle”, recuerda.
Sin embargo, además de movilizar a los cuerpos de emergencia, los presuntos responsables, que lograron escapar, causaron que el hidrocarburo se mezclara con parte del sistema de abastecimiento de agua potable de la red local.
Cerca de 15 viviendas resultaron afectadas con cisternas contaminadas, que, a la fecha, no han podido librarse del olor que dejó el hidrocarburo.
“Ya tenemos tres días, han venido diario los del Odapas a checar y es lo que les decimos, que sigue con el olor, nos dicen que es normal porque estaba muy fuerte la toma, pero por eso no hemos podido tener confianza de hacer todo normal”, agrega la joven.
Para los vecinos de esta zona, la limpieza de sus cisternas y la reparación de una presunta toma clandestina de hidrocarburo cerca de sus hogares no ha sido suficiente, pues continúan viviendo con el temor de recibir agua contaminada.
“Yo hasta ayer subí agua a mis tinacos, porque el viernes que se fueron supuestamente tuvieron que haber dejado todo arreglado, pero siguió el olor en la red, como a gasolina, no sabemos qué es, pero ya nos dijeron que con los días se va a ir quitando”, comentó otro de los vecinos de la calle 12.
Residuos del "huachicoleo" en la red hídrica
De acuerdo con el gobierno local, personal de ODAPAS continúa en revisión de la red para descartar un posible daño a la infraestructura, aunque aseguró que el servicio que se envía por tandeo en esa zona del municipio ya no cuenta con contaminantes.
“El Odapas está de manera permanente y el agua que les ha caído ya es normal. Protección civil estatal dijo que el olor iba a seguir en el ambiente por varios días porque se impregnó en la tierra y en el pavimento, pero no se descarta y se está revisando la línea”, señaló un enlace.
Hasta el momento, en la zona se han detectado 15 viviendas afectadas, de las cuales, al menos, siete recibieron apoyo para la desinfección de sus depósitos de agua. En tanto, personal de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México continúa con la investigación en la zona para fincar responsabilidades.