"Cómo todos empecé en esto como aprendiz, como ayudante, y ya llevo 40 años", son las palabras de don Teo, un hombre dedicado a la fabricación y reparación de figuras del Niño Dios que se instaló en la calle Talavera, los días previos a la Candelaria.
El 2 de febrero se acerca y la demanda de los creyentes por una figura, alguna reparación o ropa nueva para su Niño Dios, trae la romería de cada año a la calle de Talavera, en el barrio de La Merced.
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Debido a las ventas, los comercios formales en el llamado "Corredor del Niño Dios", en el barrio de La Merced, extienden su horario y contratan ayudantes temporales para apoyar en las ventas.
Por su parte, los comerciantes informales se instalan durante unos días en la mencionada calle peatonal.
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"Afortunadamente la gente sigue viniendo, sigue vistiendo a su niño Dios"
Don Teo es un hombre que desde hace 4 décadas vive de la fabricación y reparación de figuras religiosas.
Esta semana dejó su taller en San Vicente Chicoloapan, en el Estado de México, para ofrecer sus servicios en La Merced.
Por la temporada estará trabajando desde las 8 de la mañana hasta las 10 de la noche. Un horario exigente, admite, pero la temporada lo amerita.
El costo de las reparaciones y mantenimiento de las figuras depende del trabajo que requiera, pero asegura que es un buen precio a comparación de la competencia.
Con el aerógrafo en mano y desde su local semifijo en la calle de Talavera, don Teo da muestra de la experiencia que los años le han dejado.
A pesar del paso de los años, el hombre ve que la tradición de la Candelaria no se pierde.
"Afortunadamente la gente sigue viniendo, sigue vistiendo a su niño Dios y hay trabajo".
Pasado el 2 de febrero, Teo volverá a su taller en Piedras Negras, Chicoloapan, para seguir en la fabricación de figuras religiosas y prepararse para navidad y la Candelaria siguiente.
Niños Uribe
Hace 49 años un hombre se instaló en uno de los locales de la calle Talavera, de esta forma Saul Uribe comenzaba, sin saberlo, una tradición en el barrio de La Merced.
Saúl es fundador de uno de los negocios más exitosos del corredor: Niños Uribe, y quién hace años, junto con autoridades, ayudaron a que a esa calle se le conociera como "Del Niño Dios" por los negocios dedicados a esta figura religiosa.
Desde 1975 a la fecha el corredor donde comenzó Niños Uribe es un punto de referencia para la venta de artículos para celebrar la Candelaria.
La demanda es tal en estas fechas, que la gente de Niños Uribe amplía sus horarios de servicio, aunque sus ventas fuertes comienzan desde el mes de noviembre, aseguran.
Al igual que don Teo, la gente de los comercios fijos del corredor ven que la tradición de vestir al Niño Dios aún se conserva.
El éxito Niños Uribe se debe a que comenzaron a ofrecer una variedad de ropas diferente al que hacen el resto de sus competidores.
"A lo largo de los años se han sacado unos mil modelos", asegura Manuel Uribe, parte del grupo de la tienda.
Entre las miles de personas que buscan ropa para su Niño Dios está la señora Maribel y su hija. Cómo muchas personas primero cotizan entre las tantas opciones de la calle Talavera.
"Queremos que lo pinten y luego buscarle una ropa para la salud, una vestimenta del Niño de la salud", dice la mujer que camina con su figura en brazos.
La romería del "Corredor del Niño Dios" estará hasta el sábado 3 de febrero al mediodía y posteriormente se liberará la calle peatonal.
VGB