La promesa de un mejor esquema de contratación para los trabajadores de la Secretaría de Salud de la Ciudad de México (Sedesa) llegó hace unos días con el arranque de los trámites para la basificación como parte de la transición al programa IMSS Bienestar. Si bien la promesa es reducir desigualdades al eliminar contratos precarios o temporales, el personal médico aún siente incerdidumbre por las contrataciones y señalan que participar en el proceso de selección ha sido cansado y engorroso.
En entrevista con la Silla Rota, la doctora Olivia López Arellano, secretaria de salud de la Ciudad de México, asegura que estiman beneficiar a poco más de 7 mil trabajadores de la salud con su incorporación a los servicios del programa IMSS Bienestar.
Hasta el 18 de agosto más de 3 mil médicos y trabajadores, adscritos aún a la Secretaría de Salud de la CDMX y que están bajo un esquema de contratación precario, iniciaron su trámite de basificación al programa IMSS-Bienestar. Respecto a los beneficiados con la basificación, Olivia López Arellano señala que el mayor impacto positivo va ser en el salario.
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"Se va dar a aquellos que tienen más antigüedad en la institución independientemente si han cotizado al ISSSTE o no y que no tengan ninguna base en otra institución de salud, esto por justicia laboral. Sus sueldos van a ser mejorados y prestaciones, en comparación con las condiciones que tenía, por ejemplo, una persona contratada como Galeno salud o los de nómina 8. Por ejemplo, un auxiliar de enfermería de nómina 8, gana en números redondos 9,400 pesos, Galeno Salud gana 14,000, en Insabi ganaban 19,600 y en el IMSS-Bienestar va a ganar 20,300", explica la funcionaria.
La Sedesa y el IMSS Bienestar informaron que el reclutamiento del personal de salud de hospitales de la red inició el pasado martes 15 de agosto, con el propósito de que el 1 de septiembre formen parte, con plaza definitiva, de la plantilla del Organismo Público Descentralizado (OPD) IMSS Bienestar, y puedan cobrar su primer salario el día 15 de ese mismo mes.
Voces del personal de salud que ya inició su trámite
La sala Ollin Yoliztli es una de las tres sedes dónde se están aplicando las pruebas y recibiendo documentos para ser contratado en el IMSS Bienestar. En ese lugar el personal de salud ha estado hasta 10 horas en el proceso.
Una joven enfermera auxiliar, contratada bajo el esquema de Galeno salud señala afuera de la sala que el proceso para ser contratados es muy agotador y el trámite es engorroso y tardado. Ella ha estado hasta 8 horas entre las pruebas y el tiempo de espera.
"Son tres tipos de exámenes, lo que están aplicando, yo creo de acuerdo a los perfiles, además de los psicométricos y físicos, son algo largos y terminas agotada, además el personal que nos atiende no es amable, entiendo que estén cansados, pero al igual nosotros y merecemos un buen trato", explica la joven enfermera.
Otra de las observaciones del personal que está aplicando para ser basificado es la prontitud de la contratación ya que prácticamente de un día para otro les indicaron la documentación requerida y algunos papeles tardan días en ser obtenidos, como el caso de la carta de servidores públicos o en el caso de la joven auxiliar de enfermería tuvo que regresar a dejar la documentación original y ese punto no se lo había aclarado antes de ir al proceso.
La joven enfermera espera que las evaluaciones sean justas y que "realmente se cubran los perfiles que se necesitan en las respectivas unidades médicas".
Margarita es una de las trabajadoras de la salud que por su edad y antigüedad debería ser beneficiada con el proceso de basificación, pero la anestesióloga, que a sus 63 años labora en el Hospital General Tláhuac, considera el proceso la excluye y es sumamente agotador.
"Desde que inició el gobierno del presidente López Obrador hemos solicitado que se nos igualara el tabulador de sueldos con otras instituciones, así como la basificación el tiempo pasó sin tener respuesta posteriormente pospandemias se nos llamó héroes, nosotros continuamos trabajando perdiendo compañeros por el covid, ellos nunca vieron llegar algún beneficio. En este año se nos comunicó que por cuestiones de presupuesto pasaríamos a una transición", señala Margarita.
Respecto a la transición de personal de honorarios a IMSS Bienestar, la anestesióloga lo califica cómo un proceso vergonzoso. "Nos han tratado de una manera no digna y burlona, mencionando a cada momento por el personal que recibe nuestra documentación y aplica las pruebas que nos están haciendo el favor para atendernos, ya que estamos solicitando trabajo. Nosotros no solicitamos trabajo porque ya lo tenemos, la Secretaría de Salud no debería habernos sometido a exámenes de evaluación psicométrica, física y de laboratorio puesto que esa evaluación ya la hicimos cuando fuimos contratados por la Secretaría de Salud hace 12 años o más esto es una tomada de pelo", expresa Margarita.
Raymunda es enfermera y aunque ella ya cuenta con una plaza se ha solidarizado con su compañeros que no tienen este beneficio laboral y que están busándolo en el IMSS Bienestar.
"Hay que destacar es la poca o nula organización para realizar el proceso de reclutamiento, para hacer llegar la información de asistentes a las 3 sedes fue a través de una relación de nombres que en algunos centros de trabajo fue muy confusa, tenían mucha urgencia por acelerar el proceso tanto que de un día para otro informaban que se tenían que presentar en las distintas sedes a través de llamada telefónica o por correo electrónico. Los compañeros en la sede son sometidos a un examen psicométrico, no es el mismo en duración ni en contenido algunos traen 300 preguntas otros tienen 400, han terminado hasta las 2 am, además, les realizan examen médico y estudios de laboratorio", explica Raymunda.
Raymunda adelantó que el próximo 23 de octubre los trabajadores de la salud van a realizar una manifestación nacional pacífica por el derecho a la salud y el trabajo digno.
El doctor Gabriel Pérez, especialista en pediatría y que actualmente forma parte del movimiento de personal de la salud en pro de los derechos laborales explica que el negarse al esquema de contratación del IMSS Bienestar le ha costado el ser acosado laboralmente, él está contratado bajo el esquema de Galeno Salud.
"La iniciativa es de los trabajadores que estamos bajo formas de contrato precarias. Es decir, que tienen salarios 80% menores que los trabajadores de base y hacemos las mismas funciones, pero pues ganamos mucho menos y tenemos mínimas o nulas prestaciones y se llaman justicia e igualdad laboral", explica Gabriel Pérez.
El médico pediatra explica que la Ciudad de México fue una de las primeras entidades federativas donde se empezaron a imponer formas de contratación muy abusivas. "No se daban ni siquiera recibos, eran contratos de tres meses, podía llegar algún trabajador de tres meses y al llegar al checador le decían no, ya no puede checar porque ya se acabó su contrato, oigan, se acabó", denunció.
Al preguntarle al doctor Gabriel Pérez respecto al aumento salarial responde con ciertas reservas: " pues sí, quizás vamos a ganar un poco más, porque de la forma extrema, precaria en que estamos nos van a pagar un poco más, pero no le llega ni siquiera al 80% de lo que gana el de base, ni las prestaciones que tienen los de base. Y entonces seguimos igual".
Por su parte la doctora Olivia López Arellano asegura que respecto al esquema de contratación y beneficios que va traer al personal de salud el IMSS Bienestar existe mucha desinformación que ha generado la desconfianza de los trabajadores, aunque aseguró que las autoridades han tenido mesas de diálogo donde han resuelto satisfactoriamente los pliegos petitorios de los trabajadores.
"En la salud también hay que reducir la injusticia, reconocemos que tenemos trabajadores que tienen contratos eventuales o sin prestaciones, entonces es algo que tenemos que mejorar, todavía hay un conjunto de desafíos, pero que tengan confianza", es lo que pide la Secretaría de Salud de la CDMX a los trabajadores del sector.
MRV