La productora y escritora Susana Moscatel denunció por medio de sus redes sociales una situación de acoso que vivió en calles de la Ciudad de México mientras se encontraba en una cafetería descansando de su rutina matutina, por lo que alertó a otras mujeres sobre este suceso.
Fue por medio de un hilo de Twitter que Susana relató como sucedieron los hechos luego de salir a correr a las calles de la CDMX y después dirigirse al lugar habitual a tomar un café. Vale la pena señalar que la también conductora estaba en compañía de su perrita llamada Mika.
Sentada, descansando en el exterior del lugar para reponerse de su ejercicio matutino, relata Moscatel, todo iba bien hasta que a ella se acercó un señor vestido de jeans con camisa roja, lentes obscuros y barba descuidada el cual se dirigió a la productora para preguntarle si podía ocupar la silla desocupada que estaba a lado de la que ocupada Susana, a lo que Moscatel le dijo que si amablemente; sin embargo el hombre ocupó la silla en la misma mesa en vez de llevarla hacia a otro lado, a lo que Susana se sorprendió y decidió apartar la mirada del móvil y observar al sujeto.
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El sujeto que se quedó sentado en la misma mesa que Susana le preguntó que si es extranjera a lo que ella contesta que no, en un tono algo incomoda y volteó su silla a otra vista apartándose un poco del extraño sujeto y volviendo la vista a su teléfono, a lo que el sujeto le comenta que parece extranjera y le pregunta que cuanto mide; pregunta que confunde a la productora.
En ese momento, Susana se levantó del lugar y decide acercarse a la mesa de otro comensal que asiste se manera regular a dicho café, no sin antes avisarle de una manera disimulada su incomodidad.
El sujeto, con una insistencia incomoda para la productora, le dice que tiene unos hermosos ojos y que en caso de medir lo necesario o que en todo caso, si a la productora no le molesta usar tacones le puede ofrecer hasta 10 mil pesos por que vaya a la apertura de un karaoke ubicado en Puebla del cual el hombre presume ser el propietario.
Sin embargo, al momento de escuchar estas palabras, Susana ya se encontraba en la puerta lista para salir huyendo del lugar, no sin antes escuchar que el sujeto le pide su número y trata de convencerla diciendo que no tomara a mal sus preguntas.
La también escritora termina su hilo de Twitter diciéndole a las mujeres que ella tiene 50 años y que a pesar de su edad un extraño se atrevió a hacerle esta indecente propuesta; pero que no tiene que ver con la edad, sino que simplemente cualquier mujer puede estar en peligro.
Sin embargo, por alguna extraña razón, Moscatel pensó que probablemente el problema podían ser sus shorts y se preguntó a si misma si estaba muy cortos, sin embargo aseguró que esa situación nunca debe de ser una atenuante para sufrir este y cualquier tipo de acoso.
Por otro lado, asegura que nadie esta a salvo de este tipo de propuestas y hace un llamado a las mujeres a que se cuiden; a que estén en todo momento pendientes del lugar en dónde se encuentras de las puertas de salida de emergencia y que en caso de tener que llegar a ser groseras, no duden en hacerlo si se sienten en peligro e incluso si sienten que exageran en la situación es lo menos importante cuando la situación del acoso en contra de las mujeres esta realmente fuera de control.