El Valle de Toluca se inundó de payasos, ellos recorrieron las principales calles de la capital mexiquense para celebrar el día de este gran oficio, su primera actividad fue tener una misa religiosa, allí se reunieron con amigos y familiares, donde dieron gracias a su fuente de empleo y los estragos que les dejó la pandemia.
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Maquillaje, enormes zapatos, pelucas y vestuarios de colores desfilaron por el centro de esta ciudad capital, los payasos agradecieron en misa celebrada en la catedral de Toluca a las 09:00 de la mañana por tener empleo y, además tener de salud.
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Cabe destacar que desde el 2012, el día 10 de diciembre se celebra el día del payaso en México, es allí donde payasos de todas las entidades se reúnen en las plazas principales para dar las gracias por un año más de vida ejerciendo este oficio.
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En la capital mexiquense se pudo ver a payasos desde los más pequeños hasta los más grandes, entre la peregrinación que hicieron en Toluca se pudieron ver actos de malabares, trucos de magia y alguna ocurrencia que hacían entre ellos.
Payasos que acudieron concibieron entrevistas a medios de comunicación donde dijeron que no es nada fácil hacer reír a la gente, pero la risa ayuda en cualquier situación e incluso a curar enfermedades, dijeron algunos payasos.
Día del Payaso: Un oficio nada fácil
Desde el 2012 se celebra el día del payaso, conforme han pasado los años cada uno de los payasos ha hecho de su personaje uno propio, el nombre es muy importante, pues debe de ser amigable e ir acorde al personaje pues así pueden ganarse la vida.
Para hacer reír también tiene su chiste, se debe de tener una rutina bien elaborada y tener agilidad mental para contestar o actuar ante cualquier situación, además muchos de los payasos realizan actos como malabares, trucos de magia, usar monociclos, saber de música, entre otras habilidades más.
Algunos payasos han quedado en la memoria del público mexicano, por ejemplo Cepillín, Bozo, entre otros reconocidos a nivel internacional, otros más le han dado un giro más amargo con un humor para los adultos, que entre la comunidad también son aceptados pero pintan su raya para no ser confundidos entre el tipo de público.
El 10 de diciembre también se realiza una “peregrinación” en Jojutla, Morelos, donde salen docenas de payasos a celebrar en un desfile, lleno de bromas, color, risas y malabares.