Huehuetoca, Méx.- Las Ciudades Bicentenario fueron concebidas como urbes modelo autosuficientes, ambientalmente sustentables, con todos los servicios, movilidad y con fuentes de empleo; sin embargo, tras su construcción en el periodo de gobierno de Enrique Peña Nieto, hace 15 años, no tienen nada de lo prometido e incluso en algunas de ellas hay viviendas abandonadas y se registra alta incidencia delictiva.
Las Ciudades Bicentenario fueron concebidas en el periodo de gobierno estatal de Enrique Peña Nieto y las anunció el 31 de julio de 2007. El proyecto consistía en construir urbes autosuficientes, autosustentables, con fuentes de empleo propias, servicios básicos suficientes, movilidad, oficinas gubernamentales y privadas, vigilancia. Pero sobre todo incluyó la construcción de grandes complejos de viviendas.
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De acuerdo a lo que en esas fechas se anunció, las Ciudades Bicentenario se construyeron en Zumpango, Tecámac, Huehuetoca, Almoloya de Juárez, Jilotepec y Atlacomulco, pero no se edificó infraestructura urbana adicional más que los fraccionamientos con las miles y miles de viviendas, como lo consignaron diversos medios de comunicación en el Estado de México.
Para Orlando Mendoza, vecino del complejo habitacional en Santa Teresa Cuarta Sección, cuando adquirió su vivienda hace 12 años, se fue a vivir al lugar con la idea de encontrar un ambiente sano, donde se pudiera habitar con tranquilidad, donde no faltara agua potable, pero sobre todo se animó a comprarla porque en esa zona tendrían empleo.
“La verdad, mi esposa, mi hijo y yo decidimos quedarnos a vivir en estas casas que pagamos con crédito bancario, pero la decepción llegó a los primeros meses, cuando teníamos que ir a comprar los alimentos a 9 kilómetros de aquí, hasta el centro de Huehuetoca. Ahora ya tenemos agua, pero batallamos mucho, aquí no hay escuelas y mi hijo tuvo que acudir hasta Cuautitlán Izcalli a hacer su preparatoria. Aquí no tenía futuro y tuvo que emigrar a Monterrey a buscar una mejor forma de vida para él”, explicó Orlando.
El vecino de Santa Teresa, en Huehuetoca, añadió que esa zona se ha convertido en un área roja: "seguido tenemos enfrentamientos entre bandas, hay homicidios, los asaltos están a la orden del día, y escasea la vigilancia policiaca".
Actualmente hay zonas de viviendas cercanas a Santa Teresa que presentan escasez de agua y deterioro estructural, a esto se suma que el equipamiento urbano ha sido deficiente, hay problemas de movilidad y que miles de las casas están deshabitadas o ya las abandonaron. Como ocurre con la tercera sección de El Dorado, como se pudo constatar.
José Mercado, líder vecinal en Santa Teresa, explicó que las causas del abandono de las viviendas es porque aquí no encuentran trabajo, hay inseguridad y les queda muy retirado de sus fuentes de empleo, que regularmente son en municipios aledaños o en la Ciudad de México.
“Sabíamos que el trasfondo era en realidad el ceder las facilidades a las empresas constructoras de viviendas, para que hicieran el gran negocio de su vida, y así fue”, señaló Roberto Río Valle, quien fuera secretario de la Comisión de Asuntos Metropolitanos en la LVI Legislatura luego de la presentación del planteamiento de las Ciudades Bicentenario.
Describió que en los municipios donde se realizarían las Ciudades Bicentenario, únicamente se terminó la construcción de miles de viviendas y el resto de obras quedó inconcluso.
EL PROYECTO DE LAS CIUDADES BICENTENARIO
Río Valle recordó que los proyectos contemplaban la construcción en Tecámac de 55 conjuntos habitacionales desde el 2018 con 142 mil viviendas; en Zumpango 33 se otorgaron desde Desarrollo Urbano los permisos para construcción de 91 mil viviendas y en Huehuetoca hubo 30 autorizaciones para edificar 76 mil casas, como se explicó en su momento.
En 2008 se presentaron los proyectos de fraccionamientos habitacionales en Huehuetoca, Zumpango, Tecámac, Almoloya de Juárez, Atlacomulco y Jilotepec, como ciudades modelo a erigir, autosuficientes, ambientalmente sustentables y altamente competitivas a mediano y largo plazo.
A 15 años del plan diseñado para concluirse en el año 2020, predomina la escasez de agua, deterioro de sus estructuras, equipamientos y persiste el problema de movilidad, como lo explicó en su momento el coordinador del Programa de Estudios Urbanos y Medio Ambiente del Colegio Mexiquense, Alfonso Iracheta Cenecorta.
Indicó que las Ciudades Bicentenario se convirtieron en un conjunto habitacional urbano, carente de las características centrales de una ciudad como la oferta de empleo, requerimientos sociales y productivos, además de funciones urbanas que requiere una comunidad.
Iracheta Cenecorta concluyó en un estudio que la vivienda más alejada y que más ha afectado el desarrollo de la zona metropolitana de esa ciudad, está asociada a estos conjuntos habitacionales de las llamadas Ciudades Bicentenario.
De acuerdo con información de la Secretaría de Desarrollo Urbano del Estado de México, la iniciativa de las Ciudades Bicentenario contemplaba proyectos urbanos de infraestructura y equipamientos estratégicos, así como vías de comunicación de carácter regional, con el propósito de impulsar zonas de crecimiento alrededor de las áreas urbanas existentes en los seis municipios seleccionados.
El proyecto contemplaba la urbanización de una superficie aproximada de 28 mil 597 hectáreas, destacando los municipios de Tecámac y Zumpango, con 48.7% del total.
Incluso, dijo, los desarrolladores de vivienda no han podido cumplir con su plan inicial en el volumen de viviendas a construir, porque la misma autoridad federal, en este caso Infonavit, no se los permite, y porque no tiene "sentido que construyan más casas si no se ocupan".
Según el Infonavit, únicamente en Zumpango hay unas ocho mil viviendas entregadas que no fueron ocupadas, debido a que la gente no tiene cómo transportarse.
Para las constructoras como Corporación Geo que se enfocó a construir casas en Zumpango, el Consorcio Ara en Huehuetoca y Grupo Sadasi en Tecámac, las Ciudades Bicentenario fueron un negocio exitoso y habrían de adquirir reserva territorial en esas zonas para continuar con la ejecución de sus proyectos en los siguientes años.
Sin embargo, el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) destaca que el municipio mexiquense de Huehuetoca es de los que registran mayor incidencia en feminicidios, con la comisión de dos casos en enero, colocándose en los lugares cuatro del listado nacional de 67. Además de que es un lugar donde la comisión de delitos es recurrente como el robo a transeúnte, robo a casa habitación, a transporte público y homicidios, según reportan los vecinos de Santa Teresa.
MRV