La investigación de la Fiscalia General de Justicia de Morelos dio a conocer los resultados preliminares respecto a lo sucedido con Ariadna Fernanda, una joven de 23 años que fue hallada sin vida en la orilla de la carretera La Pera-Cuautla. En conferencia de prensa, la fiscalía señaló que la causa de muerte fue por “broncoaspiracion secundaria a intoxicación etílica”, es decir, que “se ahogó ella misma por estar ebria”.
Ante esto, la Fiscalía de Morelos determinó que con la información existente hasta el momento no se puede determinar si fue un feminicidio. Sin embargo, familiares y amigas de la víctima han señalado que existen inconsistencias en la investigación preliminar del caso de Ariadna, pues rechazaron que la muerte fuera causada por la misma joven y exigen se haga justicia para encontrar la verdad de lo que sucedió.
Las inconsistencias de la investigación
El pasado 30 de octubre una pareja de ciclistas hallaron el cuerpo de Ariadna en la orilla de la carretera La Pera-Cuautla, cerca de Tepoztlán. Al percatarse de la situación, compartieron las fotografías de algunos tatuajes de la joven para que pudiera ser identificada, lo cual sucedió.
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Tras darse a conocer que la víctima era Ari, como le nombran las personas más cercanas a ella, se reveló que la joven habría tomado un taxi después de estar en un antro de la colonia Condesa en la CDMX. Sin embargo, en conferencia de prensa, la Fiscalía de Morelos indicó que de acuerdo con las indagatorias, Ariadna estuvo el 30 de octubre conviviendo con amigos en Fisher's Condesa por la tarde y, posteriormente, se fueron al departamento de un sujeto que es novio de una amiga de ella. Según lo que los 11 testigos declararon, ella se fue del lugar sin despedirse de nadie.
"No se puede determinar si venía sin vida de la Ciudad de México o si su muerte ocurrió en Morelos. Técnicamente, forensemente, hasta este punto la necropsia no es coincidente con un feminicidio, pero vamos a agotar toda la investigación para descartar cualquier otra posibilidad", indicó Uriel Carmona Gándara, fiscal General del Estado de Morelos, por lo que la dependencia aún investiga para determinarlo, en colaboración con la Fiscalía capitalina y la Fiscalía de Femincidios.
Las investigaciones de la fiscalía han arrojado una versión en la que el fallecimiento de Ariadna no ha sido catalogado desde el inicio como muerte violenta de una mujer en razón de género, es decir, como feminicidio. La razón: no hay elementos suficientes, a pesar de que reconocieron que se hallaron moretones en el cuerpo, el cual fue abandonado en un lugar público.
Aún falta determinar cómo es que el cuerpo de Ariadna fue abandonado en esta zona de la carretera rumbo a Tepoztlán y como prioridad, encontrar quién o quienes fueron las personas que la dejaron ahí, lo que por sí mismo podría representar un delito.
Incluso si Ariadna perdió la vida sin que otra persona haya ejercido violencia contra ella, el protocolo para su reportar el fallecimiento no debió ser dejar su cuerpo en la carretera, sino llamar a las autoridades correspondientes.
Investigar con perspectiva de género, una obligación de la Fiscalía
La aplicación de la perspectiva de género en las investigaciones de la muerte de una mujer tiene el objetivo de analizar la violencia estructural que viven las mujeres por el hecho de serlo, ya que las características de un feminicidio se relacionan con esta violencia sistemática. En la legislación y protocolos correspondientes, se establece que en las investigaciones de un feminicidio se deben considerar las causas del crimen basadas en el sexo.
“La sentencia de Mariana Buendía en el 2015 estableció como criterio que toda muerte violenta debe de iniciarse investigando con perspectiva de género, para ver si hay elementos que acrediten que están frente a un feminicidio”, explica María de la Luz Estrada, coordinadora del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF).
Uno de los elementos primordiales que deben ser considerados para investigar la muerte violenta de una mujer como feminicidio es la exhibición del cuerpo de la víctima, principalmente en un lugar público, por ejemplo, una carretera, según indican investigadoras feministas.
Los cuerpos femeninos está relacionada con “la supremacía masculina”; en la violencia contra las mujeres, el poder juega un papel central donde los “hombres que cometen feminicidio, lo hacen como una forma de humillación y exhibición extrema del poder que tienen sobre las mujeres. Los cuerpos femeninos se han convertido en mercancía, en material de desecho”, de acuerdo con las feminista María Teresa Priego.
Por parte de las autoridades de las distintas fiscalías de la república mexicana, se han planteado accidentes, supuestos suicidios o hasta autolesiones como las causas de los feminicidios, incluso de las determinaciones más comúnes es señalar el estado de ebriedad o de intoxicación de las víctimas, poniéndolas a ellas como culpables de crimen. Por ello, familiares y activistas han reprobado esas explicaciones que carecen de investigación con perspectiva de género.
Tal como en el caso de Debhani Escobar, quien desde un inicio se planteó como “accidente” el que “ella se cayera en una cisterna”; o como el caso de Luz Raquel donde se determinó que “fue ella misma fue quien compró” lo necesario para quemarse a sí misma.
Debhani no murió, un “accidente” la mató
La noche que se encontró el cuerpo Debhani Escobar dentro de una cisterna en el motel Nueva Castilla, autoridades locales difundieron las primeras versiones de que su muerte habría sido un accidente.
El 27 de abril el médico forense Eduardo Villagómez Jasso aseguró que Debanhi cayó con vida a la cisterna, precisó que no tenía agua en los pulmones, por lo que aseguró que “ella pudo pararse y salir caminando”. Fue hasta trece días después de la desaparición de Debanhi Escobar que la Fiscalía Especializada en Feminicidios y Delitos contra las Mujeres ejerció la atracción de la correspondiente carpeta de investigación.
La autopsia realizada de forma independiente por la familia Escobar, los resultados dados a conocer en julio, revelaron que la joven fue víctima de feminicidio de 3 a 5 días antes de ser encontrada en la cisterna.
Luz Raquel fue quien “se quemó a sí misma”
La Fiscalía aportado una serie de datos sobre las actividades de la víctima el día del ataque, sin dar una explicación consistente sobre por qué la Fiscalía sugiere que Padilla “se quemó a sí misma”.
La Fiscalía de Jalisco informó que se encontró evidencia donde se insinúa que Luz Raquel compró en una farmacia botellas de alcohol y en una vinatería, un encendedor. En ese sentido, ¿por qué una mujer, que estaba a cargo de su hijo con discapacidad y que estaba siendo amenazada por sus vecinos, tomaría la decisión consciente de quemarse viva y autoamenazarse?
Además presentaron videos en los que, presuntamente, la joven manipuló las cámaras de vigilancia de su edificio y que luego aparecieron las pintas con las amenazas que posteriormente denunció. Luz Raquel pudo ser víctima de una muerte violenta tras ser quemada; se sospecha que, su vecino, quien la habría amenazado anteriormente, fue vinculado a proceso pero por lesiones y no por feminicidio.
La falta de perspectiva de género y la impunidad son dos elementos que han sido constantes en las investigaciones sobre los asesinatos perpretados contra las mujeres, además de la revictimización. En muchas investigaciones se hacen cuestionamientos sobre qué hicieron las víctimas para ser asesinadas, como si ellas fueran las responsables de sus feminicidios y no se enfoca en quiénes pueden ser los agresores, señalan feministas.