Acaxochitlán.— En escuelas primarias indígenas del municipio de Acaxochitlán empezó la distribución de la revista bilingüe “El Pan Tradicional de Acaxochitlán” (In Pantsi tlen mochichiua Acaxochitla, en náhuatl), una publicación impulsada por el cronista vitalicio del Pueblo Mágico, Arturo Castelán Zacatenco, en la que expone su investigación documental y testimonial sobre el legado artesanal de La Cuelga, bizcocho de la Sierra Otomí-Tepehua.
El autor explicó que el objetivo de esta edición es reforzar el uso de la lengua indígena y preservar la memoria gastronómica local. La investigación y proceso editorial tomó alrededor de tres años, ya que, aunque existía un documento base, fue necesario enriquecerlo con entrevistas adicionales.
“Es un trabajo que sigue abierto, porque después de la publicación hubo quienes se acercaron para hacer su aportación y compartir más información, lo cual lo vuelve fantástico”, expresó Castelán.
Un proyecto que vincula a la comunidad
La estrategia de distribución se realiza a través de los supervisores escolares, quienes entregan paquetes destinados específicamente a cada plantel, lo que garantiza que los ejemplares lleguen a su destino.
Mediante el programa “Cazadores de saberes”, que busca motivar a los niños a dialogar con sus abuelos y familias para recuperar conocimientos tradicionales. Hasta la fecha, se han editado cuatro revistas en este formato, algunas con aportaciones de municipios vecinos, todas centradas en rescatar elementos culturales, históricos y gastronómicos de la región.
Durante las visitas, se presenta la revista y se explica que otros niños participaron en su elaboración, lo que genera un vínculo directo con la comunidad. “El nombre de Cazadores de Saberes responde a esa intención, motivar a los niños a recuperar lo propio y transformarlo en textos colectivos”, señaló el cronista.
Reconocimiento al patrimonio gastronómico
La presentación de la revista se realizó en la primaria indígena 16 de Septiembre, donde se destacó la importancia de platillos identitarios como los xochimapales, elaborados a base de piezas de pan.
En sus páginas se documentan más de 110 tipos de pan producidos en Acaxochitlán, aunque el enfoque central es La Cuelga, pan artesanal con más de 90 años de tradición en la “Cuelguería Juan Panes”, la más antigua del municipio.
De gran tamaño, con forma de media luna, círculo o rectángulo, La Cuelga se distingue por su cubierta azucarada y relleno de queso. Tradicionalmente se obsequia en cumpleaños, con mensajes o dibujos personalizados, lo que la convierte en un elemento festivo y ritual de la identidad otomí-tepehua.
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