PACHUCA.- México posee una gran riqueza colonial que le heredó tradiciones, lengua y combinó otras costumbres de los antiguos habitantes indígenas del país, por lo que para rescatar todo lo anterior fue dedicado un enorme museo ubicado a solo una hora y media de Pachuca y en el que te puedes sentir como en el Virreinato.
Se trata del Museo Nacional del Virreinato localizado en el antiguo Colegio de San Francisco Javier en el municipio Tepotzotlán, en el Estado de México, y del que LSR Hidalgo te cuenta todos sus detalles para que acudas a visitarlo en compañía de tu familia, en amigos o en solitario un fin de semana en viaje corto.
Antes de fungir como el Museo Nacional del Virreinato, el inmueble fue un importante centro de evangelización de los jesuitas, quienes construyeron el edificio en la década de 1580 con tres centros de aprendizaje: dos escuelas para enseñar lenguas indígenas a evangelistas y para niños y el Colegio de San Francisco Javier para clérigos.
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Sin embargo, fuentes históricas asentaron que los jesuitas llegaron tarde a la evangelización de la mayor parte de la población del centro de México debido a que la mayor parte ya se había hecho por otras órdenes como los Franciscanos, pero se encontraron con una importante falta de educación y centraron sus esfuerzos en ese aspecto.
Una turbulenta existencia
En 1767 los jesuitas fueron expulsados de todos los territorios pertenecientes a España y la Corona tomó posesión de todas las propiedades controladas por esa religión, por lo que colegio en Tepotzotlán fue abandonado durante ocho años hasta que se puso bajo el cuidado de los sacerdotes ordinarios y se le cambió el nombre a Real Colegio de Instrucción Retiro Voluntario y Corrección del Clero Secular.
En ese sentido, durante la Revolución mexicana la escuela siguió funcionando, aunque después el colegio fue otra vez abandonado y ahora completamente por los jesuitas en 1914 y la iglesia se abrió al público, pero con consecuencias desastrosas que casi pusieron en peligro de destrucción todos los espacios.
¿Si te dicen que hay oro, qué harías?
Tras su turbulento pasado y la apertura al público, surgieron rumores de que grandes tesoros estaban enterrados en el terreno, lo que obligó a permitir búsquedas en los años 1928, 1931, 1932 y 1934, pero que causaron daños a la iglesia principal; pero el complejo fue declarado monumento nacional en 1933 y restaurado.
Una iglesia, la única que sobrevivió
El colegio se compone de tres secciones: escuela con dormitorios, biblioteca, cocina y capilla; así como las iglesias de San Francisco Javier y San Pedro Apóstol; pero el antiguo colegio y el templo de San Francisco Javier se convirtieron en el Museo Nacional del Virreinato y San Pedro Apóstol es la única que todavía se utiliza para fines religiosos.
Una basta colección de obras que te transportará a la época colonial
La mayor parte de la colección del Museo Nacional del Virreinato se compone de piezas litúrgicas del antiguo Museo de Arte Religioso, que era parte de la Catedral de la Ciudad de México, y se distribuye entre las muchas habitaciones del excolegio en las que se pueden ver piezas de diferentes materiales como marfil, madera y hasta una pasta de maíz.
En cuanto a los metales preciosos, especialmente la plata, los turistas pueden ver una amplia variedad de custodia y sagrarios, cálices, relicarios, navículas, cruces, incensarios, candelabros y copones; también hay objetos relacionados con el periodo colonial de México como artículos de uso cotidiano no religiosos.
Ya sean cubiertos y otros objetos de metales preciosos, materias textiles y herramientas. En cerámica, están expuestas piezas creadas en varios estilos de mayólica, además de piezas asiáticas traídas a través del galeón de Manila; la colección de muebles muestra la evolución de los estilos durante dicho período e incluye mesas.
Así como sillas, taburetes, atriles, y escritorios con metal e incrustaciones de concha; el museo igual cuenta con numerosas herramientas, armas y otros artículos de equitación; en literatura, se dispone de alrededor de 4 mil volúmenes escritos en varios idiomas que van desde los siglos XVI al XIX con diferentes tipos de encuadernación.
Atractivos y costos
Los servicios del Museo Nacional del Virreinato incluyen visitas guiadas, biblioteca especializada en historia colonial y tienda de libros; además, hay una hostería en el convento que sirve como alojamiento y restaurante. La entrada cuesta 85 pesos por persona y abre de martes a domingo de 9 a 18 horas.
Así llegas al museo que te transporta al Virreinato
De acuerdo con la aplicación de navegación Google Maps, para llegar desde Pachuca, en Hidalgo, al Museo Nacional del Virreinato en el municipio Tepotzotlán solo se debe realizar una conducción de 89 kilómetros de distancia, que tomará en promedio una hora con 26 minutos y pagar una caseta de 60 pesos.
cem