Pachuca.- Paraderos con techumbre, más unidades para optimizar los traslados, mejorar la conducción de los operadores y hasta quitarlo fueron algunas de las opiniones de los usuarios del Tuzobús, que en agosto de este año cumplirá 10 años de haberse implementado.
LSR Hidalgo entrevistó a algunos usuarios del mencionado transporte metropolitano, el cual fue planeado para mejorar las condiciones de traslado de los hidalguenses y acortar el tiempo en transporte público, de acuerdo con el documento “Análisis Costo Beneficio BRT Tuzo-Bús Corredor 1 Centro-Téllez”, realizado por la Corporación Rehovot, S. A. de C. V. en 2012, cuando comenzaron los trabajos de construcción de estaciones en Pachuca.
“De los beneficios que brindará el proyecto a la ciudad, en la evaluación se incluyen los ahorros por costos de operación y ahorro en tiempos de viaje de los usuarios”, escribieron en el informe, sin embargo, a casi una década de su inauguración, el 15 de agosto de 2015, los usuarios no opinaron lo mismo.
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Gerardo, de 16 años, expresó: “No hay muchas unidades. Me gustaría que hubiese más”; opinión que compartieron las demás personas entrevistadas, quienes mencionaron que si “corren con suerte” encuentran en la parada la alimentadora o bus troncal, pero en caso contrario, los tiempos de espera pueden ser de 20 a más de 30 minutos.
“...que haya más alimentadoras porque luego sí se tardan un buen, ayer tardó más de media hora en la tarde. Yo vengo cansada después del trabajo”, contó la señora Georgina, quien usa diario el Tuzobús, y agregó “hace falta que por lo menos ahí pusieran una sombrita”.
"Es mucho esperar"
Aldo, de 39 años de edad, calculó que se tardó casi una hora desde el Centro de Pachuca hasta el sur y llevaba más de 15 minutos en la parada frente a Plaza Explanada, donde un adulto mayor le contó que él llegó 10 minutos antes que él. También recordó que cuando estaba el servicio de combis “no se hacía tanto tiempo y avanzábamos más, ahorita es mucho esperar 15 o 20 minutos al rayo del sol”.
“... no sé porque se tarda tanto. En general el tuzobús es una tontería, no se si no hay muchos autobuses y cuando viene uno vienen todos ahí pegados, uno detrás de otro después de esperar 15 o 20 minutos, deberían de quitarlo o implementar más unidades” exclamó con enojo.
Los usuarios que esperaron alrededor de media hora se fueron en la primera unidad alimentadora y, en menos de 10 minutos, llegaron otras dos combis de la misma ruta, por lo que también pidieron mayor organización de los autobuses.
El análisis elaborado en 2012 también aseguró que las problemáticas del transporte público entonces eran por un modelo operacional inercial y con un reducido nivel de planeación, por lo que el proyecto planeaba la migración de un “modelo desordenado, con superposición de rutas por las mismas vialidades, caótico e ineficiente” hacia un modelo “que logre eficientar (sic) la oferta de movilidad mediante un incremento en la seguridad, velocidad, reducción de costos generalizados de viaje, así como en el incremento de los Índices de pasajeros por kilómetro”.
También hay posturas positivas del Tuzobús
Entre las opiniones también hubo comentarios positivos para el transporte metropolitano, José y María del Sol, una pareja de adultos mayores, mencionaron que los lleva hasta la puerta de su fraccionamiento y al centro, “las estaciones están bien pesadas para nosotros”, los transbordos benefician a los usuarios y es un transporte económico.
“Felicito el servicio, pero considero que tardan mucho las unidades, estaría bien que pasaran cada 3 o 5 minutos, en fines de semana me ha tocado que se tardan media hora. Hay gente que vive más al sur y pobres, ellos sufren más”, dijo María del Sol.
Asimismo, Reyna comentó que los conductores son “muy descuidados, conducen feo, toda Pachuca no es una ciudad con las calles en las mejores condiciones, hay muchos baches, está en mal estado el pavimento y pasan como si no hubiera nada” y expuso que las alimentadoras no pasan tan seguido, pero ella prefiere esperar porque trabaja toda la madrugada como enfermera y se siente cansada como para caminar.
“Si corro con suerte, ahí está la alimentadora cuando llego, pero a veces me toca esperar hasta 20 minutos o casi media hora, mucho tiempo”.
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