PACHUCA.- A 14 meses de las agresiones contra tres periodistas de Hidalgo y activistas del Santuario Cuatro Patitas Un Corazón, el alcalde Alejandro Sierra Tello ofreció disculpa pública en cumplimiento a dos recomendaciones que le emitió la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Hidalgo (CDHEH) en la que se acreditó el uso desproporcionado e indebido de la fuerza pública.
Las recomendaciones tienen antecedente en una queja que las personas afectadas iniciaron luego de que el 8 de enero de 2022 fueron agredidos cuando cubrían una manifestación en Real del Monte, para exigir la localización de 13 perros sustraídos del Santuario Cuatro Patitas Un Corazón; sin embargo, la movilización fue disuadida de manera violenta por funcionarios del municipio.
La primera disculpa es parte del primer punto recomendantorio del expediente R-VG-0006-22 a favor de los periodistas Janet Canales Zenil, José Antonio Alcaraz Suárez y Cristian Estefes Mendoza, la cual ocurrió en las escalinatas de la CDHEH con la presencia del alcalde, los secretarios municipales y policías que propiciaron los golpes.
Te podría interesar
Al respecto, el presidente de Mineral del Monte, emanado del Partido Revolucionario Institucional (PRI), agregó que la administración municipal a su cargo tomaría las medidas necesarias para garantizar la reparación del daño y asegurar la no repetición con capacitaciones.
Los tres periodistas aceptaron la disculpa, que es la primera que se ofrece a colaboradores de la prensa, pero pidieron a las autoridades de Hidalgo que no se repitan las agresiones contra comunicadores.
“El llamado a las autoridades es que podamos realizar nuestras labores profesionales con seguridad y dignidad”, mencionó Janet Canales; mientras que Antonio Alcaraz, colaborador en la Silla Rota Hidalgo, indicó que los periodistas actualmente laboran bajo un contexto desafiante y extendió el “llamado a todas las autoridades estatales y municipales, al Poder Legislativo y Judicial, para que se conduzcan conforme a la ley, sin pisar derechos humanos, sin tratar de imponer”.
Activistas también recibieron disculpa
Aquel 8 de marzo también fueron violentados Pedro Cortés Guerrero y Lorena Rivera Garnica, fundadores del Santuario Cuatro Patitas un Corazón, quienes convocaron a la movilización. Antes de empezar la manifestación fueron golpeados y trasladados a galeras por siete policías municipales y tres funcionarios que actualmente están vinculados a proceso por lesiones.
Dichos defensores de animales también recibieron una disculpa, que es parte de la recomendación R-VG-0007-22, que emitió Derechos Humanos y que también incluye a Alba Luisa Jiménez, integrante del colectivo la Jauría de Balú, así como a Marcela Martínez Melo, Marisol Sánchez Monter, Jorge Olvera Castillo y a dos adolescentes de iniciales A.A.C. y A.H.G.
Las ocho personas agraviadas aceptaron la disculpa y el primero en pronunciarse fue Pedro Cortés, quien mencionó que “vivió en carne propia la escalofriante estadística que pone al país como el más peligroso para activistas” y agradeció el respaldo que externaron defensores de otras partes del país.
“Para la autoridad, los activistas podemos resultar molestos porque defendemos, señalamos y proponemos cambios porque las cosas no están bien, cambios que no coinciden con sus intereses y es ahí donde se genera el conflicto”, mencionó la activista Lorena Rivera, quien pidió respeto para los animales.
Al concluir los dos pronunciamientos, que forman parte de las recomendaciones R-VG-0006-22 y R-VG-0007-22, el alcalde Alejandro Sierra en compañía de los policías que perpetraron las agresiones se retiraron de la Comisión de Derechos Humanos por una puerta alterna al acceso principal, sin realizar otro pronunciamiento.
cem