Pachuca.— Además de la sentencia de dos años de prisión que ya le fue dictada a la prefecta que presuntamente ejerció bullying contra Yahir, un estudiante de secundaria que se suicidó, la Secretaría de Educación Pública de Hidalgo (SEPH) podría emitir una nueva sanción, así lo informó Natividad Castrejón Valdez, el titular de dicha dependencia.
En entrevista con representantes de los medios de comunicación, el funcionario explicó que el órgano interno de Control inició una investigación de lo ocurrido en la secundaria nueve de Pachuca, misma que está por concluir y que podría terminar en la pérdida de su plaza o de su empleo, sanciones que serían las más graves.
“Desde el inicio se llevó una investigación por las áreas correspondientes de la Secretaría, concretamente el órgano interno de control, ellos llevan su proceso, su investigación, seguramente con la determinación que tomó la autoridad competente y la aceptación de la involucrada en que asume y acepta que cometió actos de violencia, será un factor más para que en unos días nos den la determinación final acerca de cuál va a ser la sanción”, expresó Natividad Castrejón.
Cabe recordar que el pasado viernes, en los juzgados de Control se emitió una sentencia condenatoria en contra de la prefecta, por el delito de violencia familiar, ello mediante un procedimiento abreviado, sentencia que puede ser conmutada por trabajo comunitario o el pago de una cantidad económica.
En ese sentido, el secretario de Educación comentó que ello podría ser un antecedente para que el órgano interno de Control emita una resolución sobre su caso.
Natividad Castrejón comentó que no se permitirá la injerencia del SNTE sección XV en este asunto, pues es muy sabido que “no se permite, no se tolera ningún tipo de abuso, ningún tipo de violencia física, psicológica, sexual, cualquiera que sea la persona que la cometa”.
Al tiempo, indicó que se investiga con imparcialidad, se permite que las instancias competentes tomen sus resoluciones, pero reiteró que no debe haber una actitud de complicidad, no de parte del sindicato y mucho menos de parte de la autoridad.
Yahir es un menor que cometió suicidio y dejó un mensaje escrito en el que responsabiliza a la prefecta porque supuestamente le hacía bullying, con señalamientos verbales, de ahí que la prefecta fue señalada del delito de violencia familiar y vía un procedimiento abreviado se declaró culpable.
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