Tulancingo.— Monseñor Óscar Roberto Domínguez Couttolenc, arzobispo de la Arquidiócesis de Tulancingo, calificó como una acción mundana la realización de quinielas y apuestas para adivinar quién será el próximo líder de la Iglesia Católica, tras el fallecimiento de Jorge Mario Bergoglio, Papa Francisco.
El prelado recordó que la elección del Sumo Pontífice es un proceso profundamente espiritual, que exige reflexión, fe y un análisis serio de los retos que enfrenta actualmente la Iglesia y el mundo, para establecer un perfil muy concreto que pueda conducir a la Iglesia en tiempos complejos.
“Hay que recordar a la gente que en el cónclave entran cardenales y de lo que se determine saldrá el nuevo Papa, las personas de fe creemos en la acción del Espíritu Santo y será además un proceso de reflexión, no de proselitismo que está prohibido, porque ahora hasta hay quinielas y apuestas, y eso es algo mundano”, dijo.
Domínguez Couttolenc explicó que la fecha del cónclave está próxima, actualmente se llevan a cabo congregaciones generales en las que se determinará la fecha, posteriormente se tendrá un voto de silencio, momentos de oración y análisis del estatus que aguarda la iglesia católica en la actualidad.
“En las congregaciones generales, que son las reuniones previas, se abordarán temas importantes que se necesitan reflexionar, como la economía, la guerra, el respeto a la familia, cómo seguir trabajando la iglesia en temas que lamentablemente prevalecen como la pederastia, en fin, los temas son claros y se han trabajado desde muchos años atrás, solo se deberá buscar el perfil más adecuado”, expresó.
El legado del Papa Francisco
Respecto al legado que deja el Papa Francisco, el arzobispo destacó que fue "un hombre extraordinario, un verdadero pastor, que siempre estuvo cercano a sus ovejas", con su pontificado, que se caracterizó por la humildad y la preocupación por los más necesitados, por lo que fue reconocido como "el Papa de los pobres", además de ser un guía espiritual para quienes buscan la presencia de Dios en sus vidas.
Asimismo, en el marco del encuentro y diálogo con niños en el Claustro de la Catedral Metropolitana de Tulancingo, como parte del Jubileo de los niños, afirmó que su visión en la Arquidiócesis es el acercamiento con la población juvenil, al ser esta población el futuro de la iglesia.
“Tenemos que trabajar en muchos rubros y el rescate de la población juvenil es uno de ellos, pero como se dice ‘Roma no se construyó en un día’, todo lleva un proceso, de hecho, el Papa Francisco también fue muy amigo de los procesos”.
sjl
