Pachuca.— De los helicópteros con ayuda que han salido de Pachuca, sólo uno llegó hasta Huehuetla, un municipio enclavado en la región Otomí-Tepehua que resultó afectado por el desborde del Río Pantepec y la crecida de un arroyo que inundó la cabecera municipal y otras comunidades, tras el paso del huracán Priscila por Hidalgo.
Sumergido entre los cerros Nanjuai (1,600 m), el Chamisal (1,330 m), y el de Ocotal (1,600 m), los habitantes de Huehuetla viven entre la desesperación y la esperanza, pues a pesar de los esfuerzos de la comunidad y el apoyo de sus paisanos que viven en Pachuca, la ayuda ha sido escasa, con un sólo helicóptero de rescate que llegó a la zona.
Se recibió cerca de una tonelada y media de víveres, una cantidad insuficiente para la magnitud de la tragedia que afecta a un municipio grande y a todas sus comunidades, consideró Lizandy, una mujer que junto con otras personas organizó la colocación de un centro de acopio en Plaza Juárez.
Te podría interesar
Lizandy, originaria de Huehuetla y ahora residente en Pachuca, ha sido testigo de la devastación que ha golpeado a su pueblo. Relata con angustia cómo la falta de información y una evacuación tardía agravaron la situación. “No hubo información de todos. Nosotros sabemos que es algo de la naturaleza. Es un desastre natural que a lo mejor no hay un culpable, pero al menos el gobierno pudo haber informado, ¿no? Porque ha pasado en otros años”, lamenta Lizandy, recordando un evento similar a finales de la década de los 90.
El origen de la tragedia
El Río Pantepec, que bordea Huehuetla, se desbordó, derribó casas y destruyó el campo. La Colonia Nueva, una de las zonas más afectadas, quedó completamente inundada. “Prácticamente Huehuetla quedó inundada. Pues sí, todas las casas afectadas. Ahora sí, casi todas”, describe Lizandy, quien tiene a toda su familia en el municipio, incluyendo a sus padres y sobrinas.
Las carreteras que conectan con Huehuetla quedaron incomunicadas, dejando a la población aislada y dependiendo de la ayuda aérea. La preocupación mayor de la mujer es por los niños y adultos mayores, ya que la escasez de pañales y agua potable se ha vuelto crítica.
Desde el martes, las lluvias fueron constantes, y el jueves por la noche el río comenzó a desbordarse, inundando las calles y casas en la madrugada, narró Lizandy.
No puede regresar
Lizandy es originaria de Huehuetla, entre semana vive en Pachuca y los fines de semana regresa a trabajar a su pueblo, pero esta ocasión, no hay carretera ni camino por donde pueda volver, y decidió junto con amigos y familiares armar un centro de acopio para las personas de su municipio en Plaza Juárez, Pachuca, donde reciben ropa, alimentos, artículos de higiene personal y limpieza. Sin embargo, la mayor preocupación es cómo hacer llegar estos víveres a su gente.
Comenta que el día anterior hubo una buena respuesta en el centro de acopio, se formaron algunas despensas con un poco de cada cosa que recibieron y se enviaron. Ahora están buscando la manera de seguir enviando, ya que solo un helicóptero ha logrado llevar ayuda, y el municipio es grande, afectando no solo al pueblo de Huehuetla sino a todas sus comunidades.
¿Cómo se originó la inundación?
Relata que el Río Pantepec, que está a la orilla del pueblo, se desbordó. En una parte de arriba, el río destruyó una casa y por ahí entró el agua. También entró por el puente que cruza a una de las comunidades. A unos metros, un arroyo que viene de la comunidad del Barrio Aztlán, a unos diez minutos de Huehuetla caminando, creció demasiado y se rompió la barda en la parte de abajo. Esto significa que el río entró tanto por la parte de arriba como por la de abajo, dejando prácticamente todo Huehuetla inundado y casi todas las casas afectadas.
Además, las carreteras que llegan a Huehuetla quedaron completamente incomunicadas, y la única esperanza es la vía aérea.
sjl
