JALTOCÁN.-Este martes 9 de abril un grupo de feligreses católicos se manifestaron frente al Juzgado Penal de la Lima ubicado en el municipio Jaltocán, del estado de Hidalgo. Con pancartas de diferentes colores, los manifestantes exigen se aplique justicia para la pronta liberación del sacerdote de la parroquia del municipio Tlanchinol.
Con la leyenda “Exigimos Justicia para el padre J.E.H.J. Fuera líneas, fuera manipulaciones, fuera manos autoridades eclesiásticas” y “Somos sus amigos de Tepehuacán de Guerrero, creemos en su inocencia”, o “libertad al padre”, los creyentes de la región huasteca hidalguense se sumaron en apoyo al sacerdote, quien esta mañana acudió a la audiencia para dar continuidad a su caso.
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Los hechos
De acuerdo con las investigaciones, el sacerdote de nombre Juan Enrique fue detenido en febrero del año 2023 e ingresado al Centro de Reinserción Social (Cereso) de Jaltocán tras ser señalado como presunto responsable del delito de abuso sexual en contra de una menor de edad. La víctima según refieren los datos de la investigación se desempeñaba como colabora voluntaria en la parroquia de San Agustín, ubicada en el barrio Centro, del municipio hidalguense Tlanchinol. La menor denunció que en el año 2020, en dos ocasiones el sacerdote le hizo tocamientos en distintas partes del cuerpo.
Los hechos se reportaron a las autoridades correspondientes para realizar las investigaciones. Al inicio del caso se informó, el sacerdote estaba en calidad de desaparecido y días después se dio a conocer había huido al Estado de Guanajuato donde en coordinación con las autoridades locales fue detenido.
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El personal de la Procuraduría General de Justicia en el Estado de Hidalgo (PGJEH) conforme al procedimiento legal dictó la vinculación a proceso como resultado de las indagatorias que realizó la Fiscalía de Delitos Sexuales y Contra la Familia, mediante las cuales se obtuvieron datos de prueba suficientes para poner al acusado a disposición ante la jueza de control.
A un año de su aprehensión, las investigaciones continúan, mientras tanto el sacerdote permanece en prisión preventiva hasta el término del caso sea para absolver o sentenciar al acusado. Los manifestantes aseguraron creer en la inocencia del sacerdote y luego de dos horas en el lugar, se retiraron.
jgp