DÍA INTERNACIONAL DE LA MUJER

8M: “justicia, seguridad y respeto”, miles de mujeres marchan en Pachuca

Alrededor de 6 mil mujeres marcharon en las calles del centro de Pachuca en el marco del Día Internacional de la Mujer

El contingente estuvo encabezado por familiares de mujeres desaparecidas.Créditos: Emma Fermín
Escrito en HIDALGO el

Pachuca.— A la voz de “No se va a caer, lo vamos a tirar”, “señor, señora no sea indiferente, se matan las mujeres en la cara de la gente”, miles de mujeres tomaron las calles de Pachuca para manifestarse y exigir justicia, seguridad y respeto, en el marco del Día Internacional de la Mujer.

Con el contingente de familiares de víctimas de feminicidio y desaparecidas abriendo la Marcha del 8M, en punto de las 17:00 horas partió el numeroso contingente desde Plaza Juárez rumbo a la avenida Juárez, gritando consignas y exigiendo justicia en los casos de mujeres y niñas asesinadas y violentadas.

Uno de los bloques estaba integrado por mujeres que por primera vez asistían a la Marcha del 8M, otro para mujeres acompañadas por sus hijas e hijos, mientras que también resaltaba el bloque negro, conformado por jóvenes que vestían de ese color y cubrían sus rostros, quienes realizaron actos de iconoclasia.

Crédito: Emma Fermín

Justicia por Lilí”, “justicia por Carla”, “justicia por Valeria”, fueron algunas de las consignas que retumbaron por las principales calles del centro de Pachuca; “vivas nos queremos”, sonaba a lo largo del contingente, mientras los colores morados y verdes predominaban en la ropa de las manifestantes, y en las pancartas se leían frases de protesta.

ÚNETE A NUESTRO CANAL DE WHATSAPP. EL PODER DE LA INFORMACIÓN EN LA PALMA DE TU MANO

La marcha recorrió avenida Juárez, avenida Revolución, Niños Héroes, Reloj y Guerrero, hasta retornar nuevamente a Plaza Juárez. En diversas ocasiones se detuvo para gritar los nombres de las mujeres víctimas de feminicidio o desaparecidas, y aunque la mayoría se desarrolló con tranquilidad, hubo un par de incidentes que llamaron la atención.

Crédito: Emma Fermín

Momentos de tensión

Cuando el contingente arribó a la calle de Guerrero, la marcha se detuvo unos instantes pasando el mercado de Barreteros, donde se dio aviso de que una niña de nueve años se encontraba extraviada, por lo que se pidió a las manifestantes arrodillarse mientras se gritaba el nombre de la infante.

Pero unos instantes después, decenas de mujeres que se encontraban en la parte posterior del grupo comenzaron a correr y algunas gritaron que “había balazos“, no obstante, lo que ocurrió es que una calle atrás, a un costado del mercado de Barreteros, se suscitó un incidente, pues un hombre arrojó agua a unas señoras y ello no agradó a las manifestantes, por lo que el auto del joven sufrió algunos destrozos y él quedó inconsciente.

Crédito: Emma Fermín

Más adelante, nuevamente hubo otro roce entre un locatario de la calle Guerrero y el grupo que integraba el bloque negro, aunque éste no pasó a mayores y el contingente continuó su camino para llegar a Plaza Juárez, donde varias víctimas de acoso, violencia y abuso brindaron sus testimonios.

Realizan iconoclasia

Durante la marcha, el bloque negro realizó actos de iconoclasia contra diversos inmuebles, entre ellos la fachada de las oficinas de Derechos Humanos, las estaciones del Tuzobús, la iglesia de La Villita, el Reloj Monumental, donde intentaron abrir las puertas, y el Palacio de Gobierno.

Crédito: Emma Fermín

En El Reloj, un grupo intentó romper las puertas para ingresar al monumento, sin lograrlo. Las que sí cayeron fueron las letras grandes de Pachuca que se encuentran ubicadas en Plaza Independencia, al grito de “no se va a caer, lo vamos a tirar”.

Crédito: Emma Fermín

Ya en Plaza Juárez, los vidrios de la entrada del Palacio de Gobierno fueron rotos y pintaron algunas consignas en las paredes en la recepción del edificio, además de que las manifestantes comenzaron a quemar los carteles que portaban en las puertas de acceso, provocando que algunos de los cristales explotarán por el calor.

La iconoclasia consiste en la “destrucción” de monumentos, esculturas, arte o íconos que representen a figuras de autoridad por motivos ideológicos, y a diferencia del vandalismo, se trata de una forma de protesta con una razón muy específica.

sjl