PACHUCA.- Encerrado y en condiciones de desnutrición, mantenían a un coyote en un domicilio particular ubicado en el municipio Tezontepec de Aldama, en el estado de Hidalgo. Tras la denuncia anónima de los hechos, personal de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) realizó el rescate de este animal para valorarlo y posteriormente poder liberarlo en su hábitat natural.
Los hechos, informó la Profepa, derivaron de un reporte anónimo donde alertaron a las autoridades sobre un coyote que tenían en una de las casas de Tezontepec como si fuera una “mascota”. Sin embargo, además de no estar en su hábitat ni con las condiciones de cuidado necesarias, el tener a estos animales en cautiverios es delito.
ÚNETE A NUESTRO CANAL DE WHATSAPP. EL PODER DE LA INFORMACIÓN EN LA PALMA DE TU MANO
Te podría interesar
Por lo anterior, las autoridades procedieron a realizar las investigaciones pertinentes y proceder con el operativo para rescatar al coyote. En el lugar, personal de la Profepa confirmó la existencia del animal, el cual presentó notable estado de desnutrición. El coyote fue puesto a resguardo de la Unidad de Rehabilitación de Fauna Silvestre ubicada en Pachuca para valorarlo, recibir la atención y una vez que esté a cien por ciento liberarlo a su hábitat natural.
“La PROFEPA realizó el decomiso de un coyote que se encontraba en un domicilio particular en el municipio de Tezontepec. Ya se encuentra en nuestras instalaciones y está recibiendo atención”, informó la Unidad de Rehabilitación de Fauna Silvestre en sus redes sociales.
Te podría interesar
Además, agregaron “común encontrar en la región del valle del mezquital este tipo de ejemplares como mascotas”. Sin embargo, invitan a la población a respetar estos animales ya que hacen énfasis en que tener fauna silvestre en cautiverio es un delito federal.
Los coyotes
El coyote o conocido en náhuatl como coyotl, perro aullador, es una especie de mamífero carnívoro de la familia Canidae. Los coyotes habitan en una gran diversidad de ecosistemas, tropicales, templados y áridos. Aunque a veces se reúnen en manadas, por lo general son vistos en solitario. Viven en promedio 6 años y son de los pocos animales que han ampliado su hábitat desde la conquista de América por los europeos. Han ocupado áreas en Norteamérica previamente habitadas por los lobos, y se han adaptado al consumo de basura y animales domésticos.
jgp