Pachuca.— Los centros de estudios tecnológicos Industrial y de Servicios (CETIS) así como Bachilleratos Tecnológicos (CBTIS) son, en el panorama nacional educativo, el nivel escolar con mayor participación en la divulgación de la ciencia, así lo dio a conocer el director general del Fondo de Cultura Económica, Paco Ignacio Taibo II.
Durante su visita en el Centro de Bachillerato Tecnológico Industrial y de Servicios (CBTIS 179), ubicado en Tulancingo, para inaugurar la feria de literatura y ciencia del programa federal “Leamos la ciencia para todos”. El titular del Fondo de Cultura celebró, muy a su estilo, la voluntad del núcleo de docentes por estimular la curiosidad por la ciencia entre los estudiantes.
“Es un honor estar con ustedes, no para que me hagan el favor de hacer un homenaje, no, el homenaje es para ustedes, por el trabajo que están haciendo en materia de divulgación de la ciencia, que es notable, vine a ver alumnos y a felicitar a maestros porque esto es una simbiosis, y fomentar la lectura es crear un país más inteligente, libre y crítico con ciudadanos que suman en la sociedad”.
Aseguró que el siguiente paso será introducir e impulsar los clubes de lectura en CTIS y CBTIS para expandir la gama de lectura con las donaciones de libros que se entregan desde el Fondo de Cultura e informó que a partir de este evento comienza el programa Pasión por la lectura y Teléfono Rojo, con el que durante 8 días se tendrán ofertas de libros a precios bajos y títulos que no son sencillos de encontrar, a través de las redes sociales del Fondo de Cultura Económica.
Paco Ignacio Taibo II propuso la creación de Biblioteca abierta para que los jóvenes tengan acceso a textos de literatura con libros que proporcionará el Fondo de Cultura a fin de estimular la lectura, exhortando a no crear una obligación que lleva a la fuga, sino introducir provocación para hacer de la lectura una curiosidad y de la curiosidad estudio.
“Pensamos que en familias donde no hay libros, se tienen hijos que no leen y es mentira, a veces es el inverso, hijos que leen llevan a la familia los libros, podemos revertir el proceso negativo y volverlo positivo. No se trata de hacer magia, no es necesario leer un ejemplar a la semana, pero sí no dejar de leer un cuento, un poema o literatura porque cambia la actitud y se puede transmitir el placer por el conocimiento, la lectura y la cultura”.
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