HUEJUTLA DE REYES.- Un 80 por ciento se lleva de avance en la construcción del escenario de Xantolo 2024 en donde se espera que lleguen unas 40,000 personas para disfrutar de esta gran festividad en honor a los fieles difuntos, la cual ha quedado arraigada en la huasteca hidalguense.
El alcalde de Huejutla de Reyes, Alfredo San Román Duval dio a conocer que el presupuesto para la construcción de este gran escenario será de 2.5 millones de pesos, 7.5 millones menos que el año pasado en dónde la cifra alcanzó los 10 millones de pesos. El escenario abarcará desde la plaza 21 de mayo, kiosco y la plaza Nicandro Castillo, ambas ubicadas en la zona centro de Huejutla y para su elaboración utilizaron material sustentable de la región, así como piedras y madera para la elaboración de chozas.
San Román Duval informó que hasta el momento toda industria hotelera se encuentra totalmente saturada, sin embargo, existe la opción de rentar algún cuarto en domicilios particulares. Señaló que sin duda esta gran festividad dejara una gran derrama económica en todos los sectores comerciales, ya que se espera que arriben turistas de otros estados y hasta de otros países que se darán la oportunidad disfrutar la gran fiesta del Xantolo.
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Finalmente dijo que se les dará prioridad a los verdaderos artesanos y no a los revendedores, ni a al comercio de otros estados, porque lo que se quiere resaltar son los productos de la región.
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La tradición en la huasteca hidalguense
En la huasteca hidalguense el Xantolo cobra gran relevancia a través de la música, el teatro, la danza y la pintura que enaltecen las tradiciones y cultura de esta forma de venerar a la muerte y honrar a los fieles difuntos. Esta también conocida como Fiesta de las Ánimas es aprovechada por algunos huastecos para ofrendar la cosecha del maíz y otros frutos. La tradición dicta que es en esta época cuando las almas están presentes y por ello el olor de las frutas, la música y la luz, recuerdan los momentos vividos en la tierra.
La preparación de esta celebración inicia desde los últimos días del mes de junio, con la siembra de la flor de cempasúchil que será utilizada en el montaje de altares. El 30 de octubre las familias colocan los altares con llamativos colores y un arco con cañas de azúcar, que muestra que la fiesta ha iniciado. A las ánimas se les recibe con rezos, copal e incienso. En las calles danzan y cantan las comparsas para celebrar junto a las ánimas su llega a este plano terrenal.
El 31 de octubre, cuenta la tradición llegan los infantes, el 1 de noviembre, se dedica a los difuntos adultos y el 2 de noviembre, es dedicado a todos los fieles difuntos. Durante estas fechas se ofrenda chocolate, tamales y pan de muerto. Las tumbas se visten y adornan para la misa en el panteón, donde se pide por su eterno descanso.
jgp