ZOOLÓGICO DE LEÓN

Están mal cuidados y mal alimentados los animales del Zoológico de León, señala diputado

En la petición de auditoria integral al zoológico propuesta por el diputado Ernesto Millán se señala “bajo nivel de cuidados veterinarios, aumento de mortalidad y deficiencias en la alimentación”

Créditos: Especial
Escrito en GUANAJUATO el

León.- El Zoológico de León enfrenta actualmente una auditoría integral debido a varias denuncias por hostigamiento, además de la posible desaparición de 2,500 pacas de forraje, alimento que, de acuerdo con el diputado Ernesto Millán Soberanes, “no es de la mejor calidad”.

Lo anterior se desprende del exhorto enviado por el legislador morenista a la Auditoría Superior del Estado de Guanajuato (ASEG) y a la Contraloría del Municipio de León para que se realicen auditorias al Patronato del Parque Zoológico de León, previo a la auditoria integral que ya está en curso.

En su denuncia, Millán Soberanes expone que “El Zoológico de León tiene empleados que carecen de las competencias y experiencia adecuadas para la atención y manejo de los animales, esto influye directamente en el deterioro de su salud, en el bajo nivel de cuidados veterinarios, aumento de mortalidad y en deficiencias en su alimentación”.

Y añade que: “El forraje con el que se alimenta a los animales en el zoológico no es de la mejor calidad, algunas pacas se aprecian mezcladas con plástico, no se tiene cuidado de que se consuman primero las pacas ‘viejas’ y luego las nuevas, lo que provoca que se estén echando a perder algunas de ellas y está pendiente aún aclarar el tema de la perdida de las más de 2500 pacas este año.

Y además, “no se acreditó la certificación de la AZCARM por las deficiencias propias que se encontraron en el manejo del Parque y Zoológico de León, por la falta de protocolos elaborados y por una deficiente gestión de las acciones de la gerencia y la dirección general”.

Las explicaciones

El legislador local explica en su exhorto que “el Gerente Operativo, nos comentan trabajadores del mismo zoológico, no tiene el conocimiento ni la experiencia para el puesto, ya que, en los procedimientos realizados a los animales se hace notar su falta de experiencia poniendo en peligro a todas las especies del zoológico…”.

Añadió que, también por comentarios de los empleados “la coordinadora de nutrición no tiene conocimiento en la materia, no realiza las pruebas que corresponden al forraje, como el anterior si hacía. Su experiencia en el manejo de la nutrición animal es cuestionable, no es menor tema que bajo la actual coordinación de nutrición se hayan ‘perdido’ 2,500 pacas de alimentos, pacas que nadie vio salir del zoológico y que a la fecha la Dirección del Parque no ha demostrado qué pasó con el alimento y lo ha mantenido en total secrecía, demostrando que algo grave ocultan o a alguien protegen”.

Y puntualiza que “el forraje que se adquiere para alimentar a las especies es de calidad deficiente, en muchas ocasiones se han retirado plásticos y elementos extraños de las pacas previo a alimentar a los animales herbívoros, situación que es sumamente peligrosa, puesto que de llegarse a alimentar con plásticos el animal moriría en el acto. La coordinadora de nutrición nunca ha informado de esto a su superioridad, siendo la primer respondiente de ello… las pacas adquiridas están mezcladas con otras plantas, más amargas, sabor que perciben y no comen lo suficiente…”.

Expone que el zoológico y sus colaboradores deben velar por la vida de las más de 1800 animales casi 200 especies, el alimento es primordial para ello, pero también “la adecuada atención veterinaria, la muerte de ejemplares por negligencias médicas y deficiente acompañamiento, ocultando además las causas de ello son una realidad”.

La muerte de animales

Ernesto Millán detalla que “el pasado mes de noviembre el director del Zoo León informó acerca de la baja de 23 animales, algunas por defunciones relacionadas con la edad y enfermedades, algunas otras por movimientos estratégicos derivados del manejo poblacional, así mismo informó la baja de 15 animales por venta, sin embargo, estos datos ‘oficiales’ entregados por el director contrastan con lo expresado por trabajadores que viven el día a día de todas las especies”.

“De la muerte de los ejemplares y de la necropsia que se les practica debe notificarse a la Titular del Órgano Interno de Control para que esté presente durante el procedimiento y constate la disposición final del ejemplar, lo anterior, fue instruido por el Consejo Directivo a través de la Comisión de Movimiento de Ejemplares, sin embargo, se le ha dejado de notificar esta circunstancia, lo que constituye una clara obstrucción a sus funciones y una práctica que se traduce en ocultamiento de la verdad y que evidencia la opacidad con la que se dirige la Dirección del parque”.

Agrega que “aunado a lo anterior, no se tiene debidamente documentada la disposición final de los cuerpos de los ejemplares que causan baja en el zoológico, ello incluso puede abrir la puerta para comerciar ilícitamente pieles exóticas de los animales muertos… prueba de lo anterior es el no haber acreditado recientemente la certificación de AZCARM, ésta no se consiguió por no tener en orden los requerimientos de la asociación para ello, además de que la persona encargada de la coordinación del procedimiento de certificación no revisó los protocolos existentes ni propuso la elaboración de los faltantes y no informó a las áreas encargadas el proceso de certificación”.

Millán Soberanes expuso también que “no obstante lo anterior, las acreditaciones nacionales e internacionales en el manejo de especies cada vez están más lejos de obtenerse, no hay forma de acreditar los requerimientos mínimos si recién el pasado 20 de noviembre una manada de 6 lobos se escapó de su hábitat, las condiciones en las que vive la elefanta Mara son deplorables, las jaulas de los osos y de algunos felinos están en pésimas condiciones, sin pasar por alto los eventos recaudatorios como lo es el Halloween Zoo, en el cual hasta la PROFEPA emitió recomendaciones para modificar los niveles de ruido y modificación de los recorridos establecidos que estresaban a los animales diurnos que habitan en el zoológico, un evento en un espacio que es para proteger a los animales y no para convertirlos en un show”.