León.- Dos estudiantes que participan en el paro del Instituto Tecnológico de León (ITL) fueron citados por la Fiscalía General de la República (FGR) a declarar este 13 de noviembre, luego de que la directora del plantel, María de Lourdes Almaguer Sánchez, presentara una denuncia en su contra.
La denuncia se interpuso el 31 de octubre por la toma de las instalaciones (consideradas propiedad federal) y por presuntos daños a la infraestructura del plantel. Los jóvenes deberán presentarse en las oficinas de la FGR en León, ubicadas en el bulevar Pespuntadores, colonia Ciudad Industrial.
En los citatorios se especifica que su presencia es para “aportar mayores datos de prueba”, y se les solicita acudir acompañados de un abogado con cédula profesional o, en su defecto, solicitar un defensor público. La advertencia señala que no asistir sin causa justificada podría implicar una multa de hasta cien días de UMA, equivalente a más de 11 mil pesos.
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Denuncian criminalización del movimiento
Ante estos citatorios, la Red Estudiantil de Apoyo y Defensa del ITL convocó a una rueda de prensa el mismo jueves 13 de noviembre a las 6 de la tarde, afuera de la sede de la Fiscalía. En su convocatoria, los estudiantes acusan a la directora de intentar “criminalizar la libre manifestación” y “perseguir políticamente” a quienes han denunciado sus presuntos actos de corrupción.
“Esto no es un conflicto personal; es un intento de silenciarnos. No nos van a intimidar con actos de represalia”, expresó uno de los estudiantes.
Tras 23 días de paro, estudiantes siguen sin lograr acuerdos
El paro estudiantil, que inició el 20 de octubre, cumple ya 23 días sin clases en ambos campus del Tecnológico de León. Los alumnos mantienen su exigencia de renuncia de la directora, María de Lourdes Almaguer, y del subdirector Edgar Omar Ponce.
Entre el 3 y el 5 de noviembre, personal jurídico del TecNM acudió a León para sostener mesas de diálogo con los estudiantes, aunque las reuniones concluyeron sin acuerdos.
Mientras tanto, el movimiento insiste en que sus demandas se centran en “una educación digna” y en la destitución de las autoridades señaladas por presuntas irregularidades administrativas.
Con la intervención de la FGR, la tensión entre la dirección y el movimiento estudiantil podría escalar en los próximos días.
FN