San Felipe-. De pronto se alzaron colosales columnas de humo blanco entre los montes, a lo lejos una línea de fuego arrasaba con los árboles y la vegetación provocando el desplazamiento y la muerte de diversidad de especies animales. La quemazón avanzaba carbonizando todo a su paso: el mega incendio forestal de San Felipe llegó a afectar 14,500 hectáreas de bosque de encino y pino.
En San Felipe recuerdan con precisión el mega incendio que devastó parte de la Sierra del Cubo, el último hogar del Lobo gris mexicano; sucedió un 30 de abril y duró 14 días.

Durante el lapso de tiempo que duró el fuego prendido en la serranía, y, de acuerdo a las autoridades del municipio de San Felipe: 1,200 hectáreas fueron afectadas por día.
Las llamas del fuego devoraron los bosques que se componían de árboles de encino y de pino piñonero que allí habitaban, el suelo quedó carbonizado, los animales corrieron, huyeron hacia otras partes, los que no pudieron huir quedaron atrapados y perecieron.
Las llamas de fuego que ondeaban hacia el cielo sobre los árboles, asolaron la región de San Pedro Almoloyan, el suelo y la vegetación quedaron carbonizados. Ese año el Monitor de Sequía en México registró en todo el estado una sequía anormal y seca y una sequía moderada, este escenario de sequedad propició que más de 14,000 hectáreas sucumbieran en el fuego.
Quedan imágenes de aquella catástrofe ecológica: troncos ennegrecidos y ramas torcidas que alguna vez estaban cubiertas de un exuberante follaje color verde, como si de pronto un dragón con toda su furia se hubiera dispuesto a acabar con toda la sierra.
El mega incendio forestal de San Felipe está catalogado como el más grande en la historia de Guanajuato.