Guanajuato.- Es de los pocos personajes cuyo nombre es empleado para denominar un evento político trascendental, como el parteaguas que marcó una nueva vida política en el estado. El “ramonazo” definió la llegada del Partido Acción Nacional al poder en Guanajuato, que fue inicialmente a través de un interinato y que posteriormente se ha ido prologando elección tras elección.
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El contador público Ramón Aguirre Velázquez fue el último abanderado del hasta entonces invencible PRI en ganar una elección a gobernador de Guanajuato. La ganó técnicamente y así fue reconocido, pero renunció a tomar el cargo, marcando un hito en la historia de la entidad.
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Ramón hoy
Aguirre Velázquez habría sido “sacrificado” por el entonces presidente Carlos Salinas de Gortari. Se hablaba de una rivalidad entre ambos, desde que eran integrantes del gabinete de Miguel de la Madrid Hurtado. Ramón también hubiera querido ser el candidato presidencial y no se le dio, aunque figuró entre los precandidatos que el propio Partido Revolucionario Institucional manejó de manera pública.
Desde aquel 29 de agosto de 1991, el día en que Aguirre Velázquez anunció que no tomaría posesión en Guanajuato, su estrella se apagó, él se apagó. Un retiro de la vida pública y política, autoexilio entre el entonces Distrito Federal y su natal San Felipe, que mantuvo hasta el año 2003, cuando su partido, el Revolucionario Institucional, lo postuló como candidato a una diputación federal, la cual perdió.
Y otra vez, a su casa en San Felipe.
Hoy, Aguirre Velázquez es considerado una de las figuras emblemáticas y más respetadas dentro del partido. Un asomo de su casta apareció con la presencia de su hijo Javier Aguirre Vizzuet como delegado de Sedesol en el sexenio pasado.
Lo que han hecho los priistas es reconocer su trayectoria mediante distintos homenajes y ceremonias en las que el político, ahora de 88 años, ha estado presente, siempre lúcido y dispuesto a compartir sus experiencias, aunque del “ramonazo” prefiere no hablar pues, según responde cuando se le toca el tema, “ya todo se habló en su momento”.
cv