León.- A diferencia de todos los estados colindantes, Guanajuato es el único donde el Partido Acción Nacional ha mantenido la gubernatura desde hace más de 3 décadas. Querétaro apenas lleva 2 gobiernos con el PAN, en tanto que Zacatecas se mantiene con administraciones izquierdistas y San Luis Potosí recién transitó hacia el Partido Verde. Jalisco está con Movimiento Ciudadano.
Para los guanajuatenses, una inercia desde 1991, con el interinato de Carlos Medina Plascencia, se ha mantenido en todos los procesos electorales estatales.
Sin embargo, el porcentaje de votos captados por los candidatos panistas en cada proceso ha variado, y nadie iguala hasta hora el 61.86 % logrado por Juan Manuel Oliva en 2006
Desde entonces
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Corría el año de 1991, y en el mes de junio debían efectuarse los comicios para elegir gobernador y renovar la Cámara de Diputados, procesos coincidentes con los de diputados federales y senadores de la República . La condición política del estado dio paso a un proceso comicial caracterizado por una amplia participación social desde sus etapas de organización hasta el día mismo de la jornada electoral. Dominaban el principal sector de las preferencias electorales, los partidos Acción Nacional, de la Revolución Democrática y Revolucionario lnstitucional, representados en sus respectivas candidaturas para gobernador por Vicente Fox Quesada, Porfirio Muñoz Ledo y Ramón Aguirre Velázquez.
Precedida de cierres de campaña masivos, llegó la jornada de votación.
El 59.35 por ciento de la población registrada en el padrón acudió a votar, según datos aportados por la Comisión Estatal Electoral (CEE). A la considerable votación registrada se acompañaron denuncias mutuas entre representantes de partidos sobre la comisión de supuestas irregularidades, así como la declaración pública de los candidatos del PAN y del PRI, atribuyendo para sí la posesión de la mayoría de los votos emitidos.
Pasadas dos semanas de la contienda, la CEE emitió cifras oficiales manifestando la ventaja a favor del candidato del PRI, resolución que dio paso a una serie de cuestionamientos partidarios del PAN y el PRD, mismos que en alguna medida influirían en la determinación del candidato oficialmente ganador, Ramón Aguirre, de no tomar posesión del cargo de gobernador.
Vendría el interinato de Carlos Medina Plascencia y fue esta la manera en que Acción Nacional llegó al Gobierno de Guanajuato para permanecer hasta ahora inamovible.
Nueva campaña de Fox
Con Ramón Aguirre en el retiro, Vicente Fox sería nuevamente candidato del PAN y enfrentaría, en la elección extraordinaria de 1995, a Ignacio Vázquez Torres por el PRI, a Malú Micher por el PRD, a Israel González Arreguín por el Frente Cardenista, y a Salvador Arévalo Maldonado por el Partido del Trabajo. El Partido Verde, siendo desde entonces el Partido Verde, por pugnas internas presentó a dos candidatas; ambas fueron rechazadas por la Comisión.
El gobierno interino había impulsado la creación del Instituto Electoral del Estado de Guanajuato como órgano autónomo encargado del proceso, además de que se creó el Código de Instituciones y Procedimientos Electorales, aprobado en noviembre de 1994.
La elección fue el 28 de mayo del 95, y los resultados oficiales de la votación fueron los siguientes:
PAN: 723,337 (58.1%)
PRI: 409,578 (32.9%)
PRD: 87,438 (7%)
PFCRN: 9,769 (0.8%)
PT: 14,833 (1.2%)
Sin ninguna apelación o recurso por parte de la oposición, Vicente Fox Quesada recibió su constancia de mayoría. De esta manera concluía un proceso electoral que innovaba en muchos aspectos el tradicional desarrollo de las votaciones.
Más competidores
Para el proceso electoral del 2000, aumentó el número de participantes en la contienda. 8 candidaturas, abarcando variedad de ideologías, plantearon sus propuestas a los guanajuatenses.
Juan Carlos Romero Hicks, catedrático, fue el abanderado de Acción Nacional. Una campaña moderada y libre de estridencias superó a la de Juan Ignacio Torres Landa García, todavía con las ideas del viejo PRI en cuanto a campañas con mítines multitudinarios en cada poblado de la entidad, a la del izquierdista Miguel Alonso Raya, de la alianza PRD-PT-PAS-Convergencia por la Democracia, a Isidoro Arellano, del PVEM, a Juan Enrique Morín, de Centro Democrático, a María Eugencia Mercade, del Partido de la Sociedad Nacionalista, a Juan Manuel Lozano Rodríguez, del PARM, y a Alberto Reyna, de Democracia Social.
Juan Carlos, exrector de la Universidad de Guanajuato, y su partido el PAN, lograron los votos de 1 millón 4,872 electores.
Quedaron (muy) abajo:
PRI: 604,359
PRD-PT-PAS-CD: 119,239
PVEM: 21,118
PCD: 10,025
PARM: 9,190
DS: 6,375
PSN: 3063
Oliva y su estructura
Las campañas para elegir gobernador en 2006 enfrentaron a Juan Manuel Oliva Ramírez, quien iba por el Partido Acción Nacional en coalición con el partido Nueva Alianza (Panal); a Miguel Ángel Chico Herrera, del Partido Revolucionario Insititucional coaligado con el Partido Verde; a Ricardo García Oseguera, de la coalición Por el Bien de Todos (Partido de la Revolución Democrática y Partido del Trabajo), y a Victoria Mendiola Campos, de Alternativa Socialdemócrata y Campesina.
El arrastre de Oliva como estratega electoral y la formación de grupos de simpatizantes a nivel popular, con estructuras de promoción del voto, le permitieron a Juan Manuel, periodista de profesión, la obtención de 1 millón 134,607 votos panistas, aunque ya con el apoyo del sector magisterial a través de Nueva Alianza, obtuvo un total de 1 millón 166,820.
Así quedaron sus contrincantes:
Miguel Ángel Chico: 494,448
Ricardo García Oseguera: 204,143
Victoria Mendiola: 20,871
2012: Márquez supera votación
Con el antecedente de la elección de 6 años atrás, nuevamente en alianza PAN-Panal, Miguel Márquez Márquez tenía el reto muy difícil de superar la cantidad de sufragios que había alcanzado su mentor Juan Manuel Oliva.
Así, la coalición “Por el Guanajuato que queremos”, Miguel Márquez contendió ante Juan Ignacio Torres Landa García, de la coalición “Compromiso por Guanajuato”, que unía al PRI y al Partido Verde. Por el PRD iba Arnulfo “Fito” Montes de la Vega; por el Partido del Trabajo, Ernesto Prieto Ortega, y por Movimiento Ciudadano, Enrique Eguiarte Alvarado.
El ciudadano Juan José Torres Batta solicitó su registro como candidato independiente, el cual le fue negado por el Instituto Electoral del Estado de Guanajuato.
El padrón electoral era de 3 millones 860,238 ciudadanos, y en la votación a gobernador acudió el 59.99 % a las urnas; el abstencionismo fue de 40.01 %.
Miguel Márquez obtuvo 1 millón 172,084 votos, superando a su más cercano contrincante, “Juani” Torres Landa, quien recibió 948,590 sufragios.
Más abajo quedaron:
Fito Montes de la Vega: 119,244
Ernesto Prieto: 28,786
Enrique Eguiarte: 21,453
Diego Sinhue: el PAN y otros
En el proceso electoral para elegir gobernador en 2018, el PAN estableció alianza con el PRD y con Movimiento Ciudadano, postulando a Diego Sinhue Rodríguez Vallejo con la coalición “Por Guanajuato al frente”.
Tuvo como contendientes a Ricardo Sheffield Padilla, por Morena-Encuentro Social-PT; a Gerardo Sánchez García, por el PRI; a Felipe Arturo Camarena García, por el PVEM, y a María Bertha Solórzano Lujano, de Panal.
Los candidatos fueron convocados a firmar un acuerdo de civilidad, que fue rechazado por Gerardo Sánchez y por Sheffield.
La participación electoral cayó a 52.49 %, con un abstencionismo de 47.51 %.
La contienda, aderezada por ver a un neo-morenista como candidato guinda, para desazón de los fundadores de ese partido, puso interés en la campaña desarrollada por Ricardo Sheffield, exalcalde leonés y hasta hacía poco, militante del PAN; además, a Sheffield le sirvió como gran impulso la inercia del candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador.
Pero ni así, Sheffield se acercó al panista Diego Sinhue.
El triunfo para el candidato blanquiazul fue con 1 millón 143,049 votos.
Abajo quedaron:
Ricardo Sheffield Padilla: 553,639
Gerardo Sánchez García: 293,824
Felipe Arturo Camarena: 157,767
María Bertha Solórzano: 66,122