Salamanca.- Ocurrió en un conocido restaurante de carnitas de Salamanca, y el rumor inundó las redes sociales, donde se afirmaba que en el establecimiento de la avenida Faja de Oro servían dedos humanos. Una foto, aseguraban, era la prueba irrefutable de lo que se decía.
En efecto, la imagen presentaba al fondo un plato de carnitas de puerco perfectamente doradas, que con solo verlas se antojaban saladitas, calientes y muy crujientes. Pero en primer plano, sobre una servilleta, una pieza alargada, también bien cocida en aceite, con la forma de un dedo humano. Un índice o cordial, quizás de un hombre adulto.
Los mensajes que se viralizaron en redes sociales a lo largo del domingo reproducen una conversación de WhatsApp en la que los interlocutores dan referencias del establecimiento donde supuestamente se sirvió.
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Las supuestas falange, falangina y falangeta se volvieron famosas. A priori se desacreditó al establecimiento, surgieron quienes comentaron que el crimen organizado podría estar introduciendo partes humanas en el reparto en las carnicerías, y fantasías semejantes. “Puede ser de un trabajador”, era otro de los comentarios.
Sin embargo, cuando la fama de las carnitas El Patrón Sacramento creció exponencialmente y no para bien, nadie reparó en fijarse en la pieza exhibida como dedo.
Normalmente en el imaginario, una forma de espiral es lo que tiene el rabo del puerco. En realidad, ya cuando está pelado, ese apéndice tiene la forma de un dedo. Más grueso y largo, pero muy parecido.
Y aunque es muy utilizado en la gastronomía para preparar diversas botanas, duro y crujiente, no todos lo conocen. Por eso la confusión.
Las respuestas de los conocedores de esta botana, ya sea en escabeche o guisada en salsa, respondieron rectificando el error ajeno: No es dedo, sabe más rico en vinagre, pero en carnitas no deja de ser sabroso.
Cv