OBITUARIO

Muere el auténtico Doctor Simi, querido médico capitalino

El galeno era muy conocido en la ciudad de Guanajuato, no solamente en San Javier, que es la zona donde tenía su consultorio

El doctor Simitrio comenzó dando sus prácticas en la delegación de Cruz Roja en la capital del estado.
El doctor Simitrio comenzó dando sus prácticas en la delegación de Cruz Roja en la capital del estado.Créditos: Cortesía
Escrito en GUANAJUATO el

Guanajuato.- A finales de los años 70 y principios de los 80, un joven socorrista de la Cruz Roja en la capital del estado derrochaba generosidad y entusiasmo para auxiliar a las personas necesitadas, víctimas de un accidente o de una emergencia médica. Eran tiempos en los que el socorrismo era bastante elemental y los primeros auxilios se brindaban más con voluntad que con recursos. 

Simitrio González Romero, "Simi" para los amigos, vio que su vocación era aliviar el dolor de las personas y decidió estudiar medicina. Se fue a hacer la carrera a la Universidad de Guadalajara, para luego volver a su ciudad, Guanajuato, para atender a sus paisanos. Antes de abrir su consultorio dio sus prácticas en la Cruz Roja.

No hacía distingos en clases sociales y para él todos eran amigos y pacientes, antes que verlos como clientes, pues ofició como un verdadero apostolado su carrera médica. 

El fallecimiento del Doctor Simitrio causó gran tristeza entre sus pacientes y amigos.

Dentro de su rutina de servicio, por las mañanas atendía a sus pacientes en la casa materna, y luego salía a abrir su consultorio en la zona de San Javier, en la calle de Matavacas, a espaldas del Castillo Santa Cecilia.

Lamentablemente, el doctor Simitrio González pasó a mejor vida cuando estaba a 2 días de cumplir los 62 años de edad, en un momento muy importante en su vida profesional, personal, familiar y productiva.

El médico gozó del afecto de sus conocidos, y cuando se supo en redes sociales la noticia de su fallecimiento, se hizo patente todo el aprecio que había por él entre los capitalinos, y que en vida siempre se lo mostraron con gratitud. "Mi doctorazo", comentaron algunos de sus pacientes.

La misa de exequias tuvo lugar en el templo de Belén, y sus restos fueron depositados en el panteón de Santa Paula.

 

cv