El reciente fallecimiento de la querida conductora Talina Fernández, a los 78 años, a causa de la leucemia que padecía, ha generado preguntas acerca de cómo se repartirá su patrimonio entre sus familiares.
El pasado 28 de junio, se dio a conocer la triste noticia del deceso de Talina Fernández, una de las figuras más queridas y respetadas del mundo del espectáculo. Durante los últimos meses, luchó valientemente contra la leucemia, pero finalmente perdió la batalla.
Tras su partida, surgieron varias interrogantes que poco a poco fueron aclarándose, como el lugar donde reposarían sus restos. Según su hijo Patricio Levy, Talina deseaba que sus cenizas fueran esparcidas en el mar de Acapulco, un lugar que amaba profundamente.
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Sin embargo, una de las incógnitas más recurrentes era el valor total de la herencia dejada por la fallecida presentadora y cómo sería distribuida entre sus seres queridos. Patricio reveló que su famosa madre realizó una modificación de último momento en su testamento para asegurarse de que nadie quedara desprotegido.
¿Cómo queda la herencia de Talina Fernández?
El hijo de Talina comentó a la prensa, durante el velorio de su madre, que habían acudido juntos a realizar los cambios necesarios en el testamento días antes de su partida, con el fin de evitar malentendidos y disputas familiares.
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Pato, como cariñosamente le llaman, aclaró que todo se realizó de acuerdo a los deseos de Fernández y anticipó que los bienes de la llamada "Dama del buen decir" serán repartidos de manera equitativa:
"Todo quedó perfecto, tal y como ella deseaba. Estaba feliz de poder dejar las cosas claras y justas para todos. Ninguno de nosotros peleará por nada, ya que estamos muy unidos y nos queremos mucho", afirmó.
Entre los beneficiarios se encuentran no solo sus hijos Coco y Pato, sino también sus nietos Paula, María y José Emilio, hijos de la también fallecida Mariana Levy.
"Se divide en partes iguales entre los hijos de Mariana, Coco y yo", explicó Patricio.
Entre los bienes materiales de la conductora destacan varias propiedades en diferentes ciudades del país, como Tequesquitengo, Ciudad de México y Acapulco. Estas propiedades también serán repartidas entre la familia, cumpliendo así los deseos de Talina Fernández.
El legado de Talina Fernández no solo será recordado por su destacada trayectoria en el mundo del espectáculo, sino también por la forma en que se preocupó por su familia y por establecer un reparto justo y equitativo de sus bienes. La unidad familiar y el amor que se profesan son el mayor testimonio del carácter generoso y bondadoso de esta gran figura del entretenimiento.