Oaxaca -En la zona oriente del Istmo de Tehuantepec inició la cosecha del mango destinado a la exportación. Durante los próximos ocho meses, las labores de corte, traslado y selección del fruto generarán alrededor de 60 mil empleos directos.
Productores de seis municipios participan en esta temporada, considerada una de las más importantes para la economía regional. Las estimaciones apuntan a una derrama mayor a los 70 millones de dólares en exportaciones, de acuerdo con el Departamento .de Agricultura de Estados Unidos (USDA),
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A pesar de los ajustes regulatorios impuestos por el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA), los mangueros prevén un ciclo de excelente producción. Estos requisitos buscan fortalecer los estándares de calidad del producto.
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Más requisitos para exportar
De acuerdo con productores locales, este año las autoridades estadounidenses fueron más estrictas al imponer nuevos criterios de corte y acopio. Entre ellos se incluyen parcelas limpias, sanitarios en los huertos y mejores condiciones laborales para los cortadores.
Las 14 empacadoras distribuidas principalmente en San Pedro Tapanatepec y Chahuites reciben la supervisión permanente de los inspectores enviados por la USDA. Su objetivo es garantizar que los procesos de inocuidad se apliquen en todas las áreas.
La temporada pasada, los mangueros alcanzaron una producción cercana a las 190 mil toneladas del fruto. De ese volumen, 56 mil toneladas correspondieron a las variedades Tomy y Ataulfo destinadas al mercado internacional.
Esa exportación generó ingresos superiores a los 70 millones de dólares, además de los empleos directos e indirectos que sostienen a miles de familias de la región.
Retos y organización productiva
Para los productores del Istmo, el desafío anual es mantener un orden estricto en la producción y exportación, con el fin de garantizar mangos libres de la mosca de la fruta. Los huertos larvados representan un riesgo que puede frenar la venta al mercado extranjero.
También se exige mayor presencia y vigilancia del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) para evitar brotes que comprometan la certificación de la región.
Productores de la zona explican que destina 2 mil 400 pesos por sus ocho hectáreas cada año a las cooperadoras encargadas de apoyar en las campañas de inocuidad. Además, contribuye con dos pesos por cada caja enviada a las empacadoras.
Estos recursos, permiten mantener los programas sanitarios y cumplir las exigencias de los mercados internacionales, una condición indispensable para asegurar la continuidad de la exportación.
La temporada avanza con expectativas altas y bajo una estricta vigilancia sanitaria que, aunque representa mayor inversión, garantiza la competitividad del mango oaxaqueño en el extranjero.