Jalisco- La madrugada no suavizó las diferencias. Al contrario. Cerca de las cuatro de la mañana de este martes, el Congreso de Jalisco aprobó el Presupuesto de Egresos para el año 2026 por 182 mil 692 millones de pesos, tras una sesión extendida, negociaciones de último momento y un arreglo que llegó cuando el debate ya estaba exhausto.
El dictamen avanzó con los votos de Movimiento Ciudadano, PAN, PRI, Partido Verde, Hagamos y un diputado del PT. Morena, Futuro y otro legislador petista votaron en contra. El choque no fue solo partidista: fue sobre a quién protege el dinero público y a quién deja a la intemperie.
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Desde tribuna los legisladores locales de oposición denunciaron los rubros que tendrán reducciones o que se quedarán cortos en el gasto para el próximo año y son los siguientes:
- Atención a familias de personas desaparecidas
- Infancias
- Salud mental
- Campo
- Medio ambiente y mujeres (autonomía, lactancia, salud reproductiva entre otros).
Búsqueda, con recursos insuficientes
Aunque en el dictamen aprobado el Congreso avaló reasignaciones por mil 143 millones de pesos, entre ellas ampliaciones para la Comisión de Búsqueda, la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas, el Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses y la Vicefiscalía, además de una bolsa adicional de 130 millones de pesos para la agenda de personas desaparecidas. Aun así, el reclamo persiste.
La Comisión Especial de Personas Desaparecidas había solicitado 350 millones de pesos para el anexo transversal de búsqueda y atención integral, pero solo se aprobaron 130 millones, menos de la tercera parte.
El ajuste dejó fuera compromisos clave. El anexo transversal prácticamente borra la atención directa a familias. El programa “Apoyos y servicios para la atención de familiares víctimas indirectas de una desaparición” Acompañar, sufre una reducción de 99.65 por ciento cuando en 2025 contó con más de 42 millones de pesos, y no se respetó la promesa de asignar más de 30 millones de pesos en subsidios de transporte público para estas familias.
Infancias y salud de las mujeres, relegadas
Las diputadas y diputados de Morena advirtieron que el presupuesto no coloca a las infancias como prioridad. No hay programas reforzados ni partidas visibles que respondan a la violencia, la pobreza o la falta de servicios que enfrentan niñas y niños en el estado, dijeron los legisladores.
El discurso social no se tradujo en números. El presupuesto reconoce incrementos a la Red de Justicia para las Mujeres. Sin embargo, el resto del mapa es irregular. Programas de autonomía económica, lactancia materna y prevención quedaron relegados.
La crítica más dura apuntó a la salud reproductiva. No existen partidas claras para combatir la mortalidad materna y la interrupción legal del embarazo apenas alcanza tres millones de pesos. La cifra contrasta con la magnitud de la demanda y con el discurso de derechos.
Salud mental, campo y medio ambiente, sin respaldo real
La salud mental fue uno de los grandes pendientes del Presupuesto 2026. Programas como Yo Jalisco: Apoyo para la Salud Mental recibieron asignaciones mínimas, de apenas cinco mil pesos, montos que no permiten sostener acciones de atención, prevención ni capacitación, y que evidencian la distancia entre la magnitud del problema y los recursos asignados.
Legisladores también advirtieron abandono al campo. Aunque el dictamen menciona incrementos, los recursos destinados a capacitación, equipamiento e infraestructura rural resultan simbólicos y sin impacto real para productores y comunidades.
En materia ambiental, el Río Santiago volvió a quedar fuera de una estrategia con respaldo financiero. La verificación vehicular quedó sujeta a revisión legislativa, pero sin una ruta clara para corregir sus impactos sociales y ambientales.
Tampoco se destinaron recursos para la ampliación de ciclovías, la prevención social de la violencia ni para estrategias de cuidados y fortalecimiento de la vida comunitaria, rubros que la oposición considera clave para atender las desigualdades estructurales del estado.
Blindaje a seguridad y carga fiscal regresiva
En general, la oposición consideró que el presupuesto carece de un enfoque de clase y no prioriza a quienes más lo necesitan, razón por la cual se votó en contra. Desde comisiones se aplicó un recorte significativo a fotoinfracciones, que pasó de 583 millones a 112.8 millones de pesos destinados al mantenimiento de 63 radares.
Mientras diversos programas sociales quedaron cortos, el dictamen blindó rubros de seguridad, como videovigilancia, C5, arcos carreteros y grandes proyectos de transporte. También se asignaron más de 242 millones de pesos a comunicación social y difusión gubernamental, además de recursos para obras estéticas vinculadas al Mundial de fútbol, pese a los rezagos que persisten en zonas marginadas.
El debate alcanzó también a la Ley de Ingresos. El aumento del impuesto a trabajadores independientes, del 3 al 5 por ciento, provocó acusaciones de una política fiscal regresiva. En contraste, el impuesto al hospedaje no fue modificado, pese al contexto del Mundial 2026. Para la oposición, el mensaje fue claro: se cobra más a quienes viven sin estabilidad laboral y se protege a los sectores con mayor margen económico.
Movimiento Ciudadano defendió el presupuesto como social y equilibrado; la oposición lo calificó como lejano a quienes menos tienen. Entre acusaciones de obediencia política y señalamientos desde la tribuna, el dictamen avanzó, dejando abierta una pregunta central: si el presupuesto más alto en la historia de Jalisco alcanzará para transformar desigualdades o solo para administrarlas.