La licitación para construir la planta desaladora que abastecerá la zona costa de Baja California fue declarada desierta por la Comisión Nacional del Agua (Conagua), por razones financieras y falta de documentación.
La gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda calificó lo ocurrido como un “tema administrativo” que no detiene el proyecto y el secretario para el Manejo, Saneamiento y Protección del Agua, Víctor Daniel Amador Barragán, dijo posteriormente que su futuro está en manos de Conagua.
“Tiene varias opciones. Puede volver a licitar y en esta nueva licitación ya se podría ver qué propuesta habría, qué seguiría, pero es un tema normal en este tipo de megaproyectos. Hay que reponer el proceso”, mencionó.
Te podría interesar
De acuerdo con el acta de fallo, hubo seis propuestas económicas que rondaron entre los 5.4 millones de pesos y arriba de 9.4 millones de pesos para la obra.
La construcción de la planta para desalar 2 mil 200 litros por segundo está programada para tres ejercicios presupuestales por un total de 12 mil millones de pesos, pero el monto para esta licitación multianual era de más de 5.1 millones de pesos.
“Prácticamente lo fuerte es 2026, 2027. O sea, no va a afectar en particular, o en gran medida la desaladora porque prácticamente seguiría en esos dos años”, agregó Amador Barragán.
En su fallo, el organismo del agua determinó que las propuestas sobrepasaron el presupuesto disponible, no consideraron otros costos o no entregaron toda la documentación que marcaba la convocatoria.
UN PROYECTO DE MÁS DE UNA DÉCADA
El proyecto de la desaladora para resolver la creciente demanda de líquido en los municipios de Tijuana, Rosarito y Ensenada, que hoy son abastecidos principalmente con parte del agua que llega a Mexicali del Río Colorado, tiene más de una década esperando.
Francisco Vega de Lamadrid, el último de los gobernadores del Partido Acción Nacional (PAN), empujó la obra como Asociación Público Privada (APP), e incluso colocó la primera piedra, pero el contrato fue cancelado en 2020 por su sucesor, Jaime Bonilla Valdez.
Ya en 2024, bajo la segunda administración estatal del partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), el gobierno federal llegó a un acuerdo con Aguas de Rosarito que ya había comprado el terreno junto al Pacífico, destinando 800 millones de pesos.
Este año Conagua lanzó la nueva licitación, pero la obra esta vez solo contempla una mezcla de recursos estatales y federales, los segundo para las obras complementarias y los primeros para construir la desaladora.
djh
