Los estudiantes de nivel básico intoxicados en Tijuana tras consumir los desayunos escolares que reparte el gobierno de Baja California, fueron afectados por un virus estacional conocido como norovirus, de acuerdo con la Secretaría de Salud del estado, Adrián Medina Amarillas.
“Es la causa más común de que se contaminen alimentos y que produzcan brotes como éste que vimos en Tijuana (...) nos tranquilizó el que se sabe que es una infección afortunadamente muy evidente, pero tiene una evolución natural corta”, comentó.
La gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda confirmó que la empresa AB Alimentos Nutraseuticos Funcionales, S.A. de C.V. que entrega diariamente 375 mil desayunos y comidas, será sancionada económicamente.
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“Si se tiene que sustituir se sustituye”, respondió durante su conferencia de prensa semanal realizada en Mexicali, donde le preguntaron por qué solo será multada.
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La empresa que entregó los desayunos
La empresa está contratada en Baja California desde 2019, cuando llegó al gobierno estatal el ahora coordinador del Partido del Trabajo (PT), Jaime Bonilla Valdez.
En la Plataforma Nacional de Transparencia hay cuatro publicaciones de contratos entregados por la Secretaría del Bienestar de Baja California, pero los enlaces a los documentos no funcionan y los montos entregados aparecen en cero pesos.
La gobernadora Ávila Olmeda detalló que resultaron afectados 78 menores de edad y 10 fueron atendidos en emergencias, donde de acuerdo con Medina Amarillas, permanecieron por más tiempo para atender la deshidratación producto del vómito.
El secretario de Salud también informó que tras una revisión a las cocinas y los planteles donde hubo brotes determinaron que el contagio llegó de alguna de las 18 personas que trabajaron en la preparación de los platillos.
“Ninguno manifestó haber tenido una reacción en los días previos”, agregó el secretario de Salud de Baja California.
Agregó que una persona con el norovirus es potencialmente contagiante durante 10 días, así que quienes laboraron ese día deben estar fuera de las cocinas mínimo durante este mismo periodo de tiempo para evitar un rebrote.
Según la gobernadora y el secretario de Salud, las revisiones estuvieron a cargo de las comisiones Estatal y Federal de Protección contra Riesgos Sanitarios (Cepris y Cofepris, respectivamente), quienes tomaron muestras de alimentos, de productos utilizados para su preparación, y de agua.
La intoxicación ocurrió la mañana del pasado viernes 3 de septiembre en diversas escuelas y obligó al traslado urgente de los estudiantes para recibir atención médica por dolor abdominal, náuseas, vómito y en algunos casos diarrea.
“Afortunadamente no era una cantidad que rebasara la capacidad de los hospitales públicos y algunos hospitales privados que incluimos”, mencionó Medina Amarillas.
djh