¿Y la gobernadora?
La presidenta Claudia Sheinbaum regresó a Veracruz, para dar seguimiento a la tragedia que viven decenas de personas tras haber resultado afectadas por las torrenciales lluvias del fin de semana pasado. En esta ocasión fue a el municipio de El Higo, y la novedad es que esta vez no la acompañó la gobernadora Rocío Nahle. ¿Qué fue lo que pasó? Lo cierto es que, en la primera visita del domingo pasado, a la mandataria estatal no le fue nada bien al tener que dar la cara a la ciudadanía.
Gallardo muy apuntado
Y quien estuvo muy pegado a la presidenta Claudia Sheinbaum en su visita a la Huasteca Potosina, fue el gobernador Ricardo Gallardo, quien no se le despegó a la mandataria, para salir en todas las fotos. El gobernador de San Luis Potosí, quien ha estado muy señalado por querer imponer el nepotismo en su esposa, Ruth González, decidió ensuciar las botas y lanzarse a la caminata que hizo la presidenta Sheinbaum, para revisar cómo van los trabajos de limpieza y censo en las comunidades afectadas por lluvias.
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La defensa del gobernador
Quien salió en defensa de José Ramiro López Obrador, a quien se le señala de haber obtenido 13 ranchos en los últimos 3 años, además de varias cabezas de gabado, fue el gobernador de Tabasco, Javier May. El mandatario estatal se montó en el mismo discurso de defender lo indefendible, dijo que todo es parte de una campaña de desprestigio, una campaña mediática por parte de los conservadores.
Desde la Lacandona
Quien se apareció fue el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), el cual, al lado del Congreso Nacional Indígena, hicieron un llamado urgente a solidarizarse con los pueblos originarios del norte de Veracruz, que resultaron afectados por las intensas lluvias, y para no dejar, dijeron que todo se debe al abandono gubernamental.