TIJUANA, Baja California. - Manuel, esposo de Gabriela G., sostuvo la lona con la que familia y amigos marcharon en Tijuana exigiendo justicia para la enfermera y madre de familia asesinada.
Aquel 9 de agosto, a casi un mes del crimen, Manuel afirmaba que estaban en la incertidumbre porque la Fiscalía General Estatal de Baja California (FGE), no daba muestras de avanzar en la investigación.
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“No hemos querido que nos digan exactamente la información que ellos tengan, pero sí que nos den un norte (explicación), que nos puedan dar algo de tranquilidad. No la vamos a tener de la noche a la mañana, pero que nos digan un dato que nos pueda tranquilizar”, pedía.
Según contó ese mismo día, él y su hijo de 17 años de edad salieron de la casa familiar el 12 de julio por la mañana cuando escucharon los disparos de arma de fuego que terminaron con la vida de Gabriela, quien llegaba en su automóvil de trabajar.
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Manuel resultó el autor intelectual
Ahora, Manuel es acusado de ordenar su muerte, por eso le fue cumplimentada una orden de aprehensión por feminicidio agravado que este martes 27 de agosto lo llevó ante un tribunal.
“Él era el principal exigente en ese tema de que haga justicia. Afortunadamente pudimos darle respuesta a su exigencia”, dijo Rafael Orozco Vargas, fiscal central.
Mientras esa primera audiencia transcurría, la FGE informaba en conferencia de prensa que la línea de investigación apuntó al esposo gracias a incongruencias e inconsistencias entre declaraciones, la actitud de Manuel y la información del círculo más cercano a la pareja.
Las investigaciones de la fiscalía
“Si bien es cierto él seguía siendo su esposo, la relación sentimental real ya había concluido. Incluso había una relación (de ella) con otra persona, totalmente normal toda vez que ya tenía tiempo que no tenía una relación. Eso generó conflictos en la pareja que seguía cohabitando”, dijo Orozco Vargas
De acuerdo con el fiscal central, por ser parte de la familia, Manuel estuvo todo el tiempo cerca de la información que llegaba a los investigadores, e incluso intentó dirigir el foco de las pesquisas hacia otra persona.
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Pero no lo consiguió y fue detenido en la vía pública, sin oportunidad de oponer resistencia. En la cita de este martes su defensa solicitó que la audiencia de vinculación a proceso, en la que el juez resolverá si la fiscalía tiene elementos para presumir que Manuel mandó matar a Gabriela, sea celebrada este viernes 30 de agosto.
Estos días permanecerá en prisión preventiva y la FGE asegura que no es la única orden de aprehensión vigente, aunque se reservó detalles sobre la autoría material del feminicidio.