Mérida, Yucatán.- José Miguel Trejo Solís, de 32 años, desapareció en circunstancias preocupantes en Mérida, Yucatán, hace dos meses. El último avistamiento de José Miguel fue el 7 de diciembre, cuando se dirigía a una sucursal de Banco Azteca para depositar una suma considerable de más de 100,000 pesos para la empresa Dunosusa, donde trabajaba. Un compañero de trabajo lo dejó en el banco, pero desde entonces, José Miguel no ha regresado ni al trabajo ni a su hogar, dejando tras de sí un misterio y muchas preguntas sin respuesta.
La situación se complicó aún más cuando Dunosusa, en lugar de informar a la familia de José Miguel sobre su ausencia, optó por denunciarlo por el presunto robo del dinero. La madre de José Miguel, Elizabeth Solís, expresó su desolación y frustración ante la falta de empatía y acción de la empresa, señalando que no hubo esfuerzos por parte de Dunosusa para determinar el paradero de su hijo o el destino del dinero desaparecido.
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La familia, buscando respuestas, presentó una denuncia en la Fiscalía General del Estado (FGE) el 8 de diciembre. Sin embargo, la ficha de búsqueda para José Miguel no se publicó hasta casi un mes después, el 5 de enero, lo que añadió más desafíos a la ya desesperada búsqueda. A pesar de sus esfuerzos, la familia ha enfrentado obstáculos significativos para acceder a las grabaciones de las cámaras de seguridad del banco y las cámaras de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), que podrían ofrecer pistas cruciales sobre su desaparición.
El día de su desaparición, José Miguel vestía jeans azules, una playera verde y tenis. Se le puede identificar por la falta de la falange distal del dedo medio en su mano izquierda y por su distintiva barba tipo candado sin bigote. La familia ha hecho un llamado a la comunidad, instando a cualquier persona con información sobre su paradero a ponerse en contacto a través de los números proporcionados.
Este caso destaca un problema más amplio en Yucatán, donde Mérida registra el mayor número de desapariciones. Datos del Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas indican que desde 1961 hasta la fecha, se han reportado 6,066 personas desaparecidas en el estado, la mayoría en Mérida, seguido por Kanasín. Actualmente, hay 308 casos abiertos de personas que aún no han sido localizadas en Yucatán, lo que subraya la continua lucha contra la desaparición de personas en la región. La comunidad y las autoridades siguen buscando respuestas, esperando que cada caso abierto, como el de José Miguel, se resuelva pronto y traiga paz a las familias afectadas.