Alrededor de 10 mil policías de las distintas corporaciones en Baja California serán enviados de manera extraordinaria a realizar exámenes de control y confianza.
La Secretaría de Seguridad Ciudadana en el estado dijo que no hay plazo de tiempo específico para completar esta revisión, pero confirmó que obedece en parte a los últimos episodios donde agentes se han visto coludidos en actividades del crimen organizado.
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Por ejemplo, actualmente en Tijuana hay seis elementos amparados contra su aprehensión por el delito de secuestro; en Ensenada hay cuatro policías vinculados a proceso y otros tres prófugos por presuntamente colaborar con el crimen en ataques a policías y otros delitos, y en Mexicali ya hubo una revisión extraordinaria por situaciones similares.
“Se va a hacer por dos razones: porque ya vimos que sí se necesita, y dos, porque es también otra de las políticas de seguridad que va a implementar el nuevo gobierno federal”, comentó Leopoldo Aguilar Durán, secretario de seguridad en Baja California.
Además, han notado que hay quienes no atienden las visitas periódicas ya programadas a C3 para realizar sus exámenes de control y confianza
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“Obviamente hay un ciclo que tienen que cumplir y buscando sustraerse tienen argumentos como que están incapacitados y no llegan”, dijo Aguilar Durán.
La orden de una revisión extraordinaria, subrayó, contempla no sólo a las policías de los siete municipios, sino también a los agentes estatales.
Depurar a las policías
La Secretaría de Seguridad de Tijuana, con más de 2,000 elementos, es la corporación más grande del estado y está esperando el aviso de la Secretaría de Seguridad de Baja California (SSPCBC), para enviar a los policías al C3.
Ismael Burgueño, alcalde desde el pasado 1 de octubre, afirma que por lo pronto todas las investigaciones en contra de agentes que recibió de la pasada administración están siguiendo su curso.
Subrayó que con el cambio de administración también vino una renovación de mandos pero evitó adelantar algún escenario que implique el despido de policías.
“No podría adelantarme a hablar de una depuración. Yo creo que el primer paso es precisamente esos procedimientos de confianza que permitan seguir trabajando con perfiles de policía municipal que tengan la capacidad de estar allí”, respondió.
En Tecate, por otro lado, donde hay apenas 200 policías municipales y la corporación no ha estado exenta de sospechas de colaborar con el crimen organizado, el alcalde Román Cota que también llegó en octubre al cargo ya adelantó que sí habrá bajas.
Durante una de sus conferencias de prensa semanales dijo que entre 20 y 30 de los elementos no han pasado los exámenes de control y confianza, e incluso que hay policías en activo que no pasaron por la academia de formación a cargo del estado.
“Uno de los compromisos que tenemos nosotros con la comunidad es depurar a la policía municipal. Dignificarla, primeramente”, adelantó.
La experiencia de Mexicali
En la capital del estado, donde los agentes asignados al Valle fueron enviados de forma extraordinaria a atender los exámenes de control y confianza cuando no respondieron a una solicitud de auxilio de fuerzas estatales que estaban en medio de una agresión armada, la medida generó conflictos.
Policías municipales presentaron una queja ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDHBC), y denunciaron que la revisión incluyera a personal incapacitado o que estaba de vacaciones.
El secretario de seguridad en el estado, Leopoldo Aguilar Durán, confirmó lo segundo pero sostiene que el proceso fue conforme a derecho y sin abusos.
“Dentro de los exámenes de confianza están los iniciales, los periódicos y los extraordinarios. En la reglamentación del C3 dice: otros, en esos otros cabe una definición muy clara, que pueden ser llamados en cuanto la autoridad así lo requiera”, apuntó el también comandante de las fuerzas armadas.