TIJUANA.- Este 23 de enero fue el segundo aniversario luctuoso por el asesinato de la periodista Lourdes Maldonado, y el gremio de Tijuana organizó una vigilia para recordarla y enfatizar que el crimen no ha sido plenamente castigado.
“Nada justifica arrebatar una vida y por supuesto no podemos quedarnos cruzados de brazos cuando está pendiente un acto de elemental justicia”, dijo Enrique Sánchez, un veterano periodista local que compartió parte de su carrera con la originaria de Gómez Palacio, Durango.
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Durante la vigilia, el rostro de Maldonado López y algunas fotografías ejerciendo su profesión fueron proyectadas en la base de una glorieta vehicular en Zona Río Tijuana.
Y cuando fue reproducido el momento en que le dijo al presidente Andrés Manuel López Obrador, durante una conferencia matutina, que mantenía un pleito laboral con el hoy senador y ex gobernador de Baja California, Jaime Bonilla Valdez, su voz se escuchó una vez más.
“Para pedirle apoyo, ayuda y justicia laboral, porque hasta temo por mi vida”, dijo en aquella “mañanera” del 26 de marzo de 2019.
Casi tres años después, el 19 enero de 2022, Lourdes celebraba el triunfo legal y la posibilidad que tendría de exhibir las cuentas fiscales de Primer Sistema de Noticias (PSN), la empresa de televisión y radio que encabeza Bonilla Valdez.
“Voy a saber que nunca pagó seguro social. que nunca pagó infonavit y que nunca pagó Afore y que no existe nómina de empleados”, dijo esa vez acompañada de su abogado.
Cuatro días después, recibió un balazo en el rostro cuando se estacionaba frente a su domicilio. Le dispararon a quemarropa a través de la ventanilla del auto y allí mismo quedó sin vida.
Tres hombres fueron detenidos y el 26 de octubre del mismo año llegaron a un acuerdo con la Fiscalía General del Estado (FGE), para aceptar su culpa a cargo de una reducción de la pena por homicidio que alcanza hasta los 60 años de cárcel.
Guillermo Julián Castro Garzón, de 23 años, recibió una sentencia de 24 años por haber disparado el arma, mientras que sus cómplices Erik Eduardo Contreras Ramos, de 30 años de edad, y Kevin Alberto Villarino Hernández de 19, fueron sentenciados a 20 años de prisión.
Del motivo del asesinato y de la autoría intelectual, las autoridades bajacalifornianas no han dicho nada.
“Esto no puede quedar así, haya sido quien haya sido, lo tiene que pagar. Esto no admite adjetivos, justicia a secas. Nada más justicia”, dijo Enrique Sanchez durante la vigilia de este martes.