TUXTLA GUTIÉRREZ, Chis.- Toque de queda, desabasto de alimentos y combustible; suspensión de clases en todos los niveles escolares, presencia de “halcones” en motocicleta y hombres armados en camionetas, es parte del clima de inseguridad que se vive en los municipios que conforman las regiones Sierra y Fronteriza de Chiapas, ante la disputa del territorio por parte de los cárteles Jalisco Nueva Generación (CJNG) y el de Sinaloa (CDS).
De acuerdo con los reportes que emiten casi a diario, pobladores de esas zonas, la situación se descontroló de nueva cuenta a raíz de la desaparición, el pasado 7 de septiembre, de Berni Flor Mejía Velázquez, maestra del plantel 216 del Colegio de Bachilleres de Chiapas (Cobach), en el ejido río Guerrero, municipio de Amatenango de la Frontera, quien apareció muerta el martes 12 de este mes.
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Como el hecho generó mucha indignación entre varios sectores, mismos que organizaron algunas acciones de protesta para pedir justicia no sólo por la profesora asesinada, sino por el incremento de muertes y desapariciones, los grupos criminales, sobre todo uno de ellos “disfrazado” de agrupación social conocida como “Maíz”, también se organizaron y bloquearon carreteras para impedir el tránsito de vehículos particulares y de transporte de carga y pasaje.
Manuel (nombre ficticio para cubrir la identidad del entrevistado por La Silla Rota), maestro de una primaria en el municipio de Frontera Comalapa, confiesa que, desde el sábado pasado, se agudizó otro problema: ya no hay gasolina, “dísel”, ni gas LP, “estamos secuestrados, porque no hay forma de entrar ni de salir del pueblo”.
Si subsisten, dijo, es porque de forma previa compraron un poco más de despensa, pues otra situación que les afecta es que las cosas se han encarecido en la zona, o simplemente se terminaron.
“En el tema de las clases, nuestros líderes sindicales tienen temor a hacer un pronunciamiento, al menos en Comalapa no se ha manejado así, porque tienen miedo a ser amenazados, principalmente por el Cártel Jalisco Nueva Generación que ya ganó más terreno”, confesó.
De acuerdo con otros testimonios recabados por este portal de noticias, en breve se aplicará el “toque de queda”, mientras que las camionetas, con hombres armados, y las motocicletas con los “halcones”, continúan sus rondines en todos los poblados.
“Nos indigna”, dice otra maestra de Frontera Comalapa, que el gobierno del estado presuma cifras positivas en el tema de seguridad, “nos ponen como uno de los estados con mayor seguridad, lo que es una mentira”.
Sin clases por inseguridad
Desde que el pasado 7 de septiembre la maestra Berni Flor fue sacada por tres hombres encapuchados y armados, de su salón de clases, ante la mirada de sus alumnos, el temor escaló más alto.
Por ello, algunos directores de escuelas empezaron a enviar sus oficios en los que dejan en claro que, ante la ola de violencia, es imposible regresar a las aulas.
Representantes de la zona escolar 025 advirtieron en su oficio (001-2023/2024) que, ante la negligencia y ausentismo de las autoridades competentes para hacerle frente a los actos delictivos cometidos por grupos criminales en la región Sierra Madre de Chiapas, optaron por suspender, temporalmente, las actividades en todas las escuelas de ese sector.
Con ello, detallaron, se trata de no exponer la integridad física del alumnado, personal docente y padres y madres de familia.
De igual forma, docentes de la zona escolar 132, también ubicada en la Sierra Madre, enviaron un oficio al gobernador Rutilio Escandón y a la Secretaría de Educación del estado, en el cual dejan en claro que en el municipio Honduras de la Sierra tampoco habrá clases hasta nuevo aviso, pues no quieren poner en riesgo la vida de los alumnos.
“Tenemos la necesidad y la obligación de manifestarnos ante la situación crítica y ola de violencia que está sucediendo en nuestra región”, enfatizaron. A este llamado se sumaron académicos del municipio El Porvenir, quienes responsabilizaron a los tres niveles de gobierno por lo que les pueda suceder.
Víctimas de cobro de piso, obligados a marchar y bloquear
Desde la aparición de “Maíz”, a la mayoría de las familias de las poblaciones de los municipios de la Sierra y Fronteriza no les ha quedado más que participar en lo que la misma les ordena, como marchas y bloqueos carreteros.
Con base en algunos expertos en la materia, “Maíz” ha obligado a muchas personas a pagar “derecho de piso”, desde transportistas, vendedores ambulantes, “estibadores, albañiles, comerciantes, estilistas, joyeros, entre otros, quienes también son obligados a participar en esas acciones pues, de lo contrario, tendrían que pagar multas que van desde los 1,500 pesos o hasta el cierre o suspensión, por al menos dos semanas, de sus negocios o actividades.
“Manuel”, el maestro consultado por La Silla Rota, teme que, en cualquier momento, también el magisterio tenga que pagar una cuota para no ser molestado o sufrir represalias por parte del crimen organizado.
En entrevista, Luis Alonso Abarca González, del Comité de Derechos Humanos “Digna Ochoa”, aclaró que no existe duda de que los gobiernos federal y del estado tienen vínculos con la delincuencias organizada, “es un narco-Estado, no hay otra forma de describir lo que vivimos en México”.
Avaló que “Maíz”, ligada al CJNG, ha obligado a transportistas del municipio de Chicomuselo a pertenecer a esa organización, “y quienes no quisieron entrarle, fueron expulsados, sin nada, y la gente no quiso denunciar”.
La situación, declaró, no se calmó pese a la presencia de la Guardia Nacional y del Ejército Mexicano en meses pasados luego de una “expulsión” masiva de habitantes por la imparable violencia y, de nueva cuenta, hay gente que se ha tenido que desplazar debido a la fuerte presencia de los cárteles de la droga.
“Por eso decimos que es una burla que se diga que Chiapas está en paz, se han manipulado las cifras, es decir han ‘rasurado’ cifras de desapariciones y ejecuciones, con todo dolo y como una política del gobierno de encubrimiento”.
Como lo documentó La Silla Rota, en mayo pasado, más de 3,500 personas tuvieron que huir de sus hogares, debido a que la violencia se agudizó entre el CJNG y el CDS, lo que incluso dejó una cifra de hasta 60 muertos de ambos bandos, dato que las autoridades no oficializaron.
A esto se le sumó, según investigaciones, al menos un centenar de personas desaparecidas. Se cree que éstas fueron reclutadas por el crimen organizado.
Noche mexicana: entre tragedia y plazas vacías
Mientras que en algunos municipios de Chiapas se celebraba, el pasado 15 de septiembre, el “Grito” de Independencia con la presencia del pueblo, juegos pirotécnicos y grupos musicales, en otros lugares, como Siltepec, Frontera Comalapa y Motozintla, la noche mexicana se vio opacada por el clima de violencia.
Uno de los casos más trágicos fue lo ocurrido en el Ayuntamiento de Villaflores (ubicado en la región Frailesca que también ha sido opacada por la presencia de grupos criminales), pues luego de que su alcalde Mariano Rosales Zuarth diera el “Grito” desde el balcón presidencial, su hijo Mariano Rosales y otras dos personas murieron luego de que en un convivio en el interior del Palacio Municipal se suscitara una balacera.
Otra escena que entristeció a los chiapanecos fue lo ocurrido en Siltepec, luego de que sus autoridades municipales cancelaran el festejo patrio por el mismo clima hostil; ante ello, dos niños ofrecían el “Grito” desde el balcón de lo que parece ser su vivienda. Uno de ellos, incluso, utilizó una trompeta.
En Motozintla, de igual forma, su presidente municipal ofreció el “Grito” pero sólo ante sus trabajadores, pues “ni una sola alma” salió para formar parte del festejo.
Mientras que, en La Trinitaria, su alcalde Ervin Leonel Pérez Alfaro difundió el jueves 14 de septiembre un video en el que daba a conocer que, ante el peligro que se vive en la región, decidieron cancelar la noche mexicana ante sus gobernados.
“Por eso hoy vemos la necesidad de cancelar las fiestas patrias que se tenían preparadas, derivado de toda la situación que se vive en la cabecera municipal y la región riego del municipio; no podemos poner en riesgo a nuestra ciudadanía, por eso les pedimos su comprensión y su apoyo para que nos entiendan del por qué se cancela este evento tan importante”.
En el caso de Frontera Comalapa, en donde desde hace tres años no se festeja este 15 de septiembre, sus autoridades municipales, encabezadas por el presidente Alejandro Mérida, programaron un “Grito virtual”.
A la plaza central no se paró nadie, debido al clima de violencia provocado por cárteles de la droga, mismos que han generado desapariciones, muertes y constantes enfrentamientos en la región.