DESAPARECIDOS EN SONORA

Arcadio viajó de Arizona a México, tomó un atajo y desapareció

Este empresario radicado en Arizona volvía a su natal México para cobrar el alquiler de sus locales comerciales y ver otros negocios; de regreso a Estados Unidos le perdieron el rastro

Este empresario radicado en Arizona volvía a su natal México para cobrar el alquiler de sus locales comerciales y ver otros negocios; de regreso a Estados Unidos le perdieron el rastro
Arcadio Pesqueira.Este empresario radicado en Arizona volvía a su natal México para cobrar el alquiler de sus locales comerciales y ver otros negocios; de regreso a Estados Unidos le perdieron el rastroCréditos: ESPECIAL
Escrito en ESTADOS el

HERMOSILLO.- Arcadio Pesqueira es un migrante que dejó Sonora por la inseguridad y se estableció prósperamente en Arizona. Sin embargo, sus múltiples negocios lo hacían volver frecuentemente a su tierra. La tarde del 22 de mayo pasado regresó una vez más a Caborca, a bordo de una camioneta de modelo reciente.

Era un viaje corto porque tenía un compromiso en Tucson. Para llegar pronto a su casa, Arcadio decidió tomar un atajo, la carretera Átil-Tubutama. Esa fue la última vez que lo vieron.

“Por ahorrar tiempo se fue por ese camino y, lamentablemente, ya no se supo de él”, lamentó Cecilia Delgado Grijalba, fundadora del colectivo Buscadoras por la Paz de Sonora. “Varios han desaparecido en ese trayecto”, afirma.

Arcadio Pesqueira tiene 33 años y las nacionalidades mexicana y estadounidense. Radica en Tucson. Sus seres queridos viven en ambos lados de la frontera. Viajaba en una camioneta pick up Jeep Gladiador color negro, modelo 2022, con placas de Arizona.

Los familiares de Arcadio Pesqueira lo describen como un hombre trabajador, dedicado a la ganadería, agricultura y a la compra y venta de oro, además de alquilar locales comerciales en Caborca.

“Solo venía a Sonora por las rentas que cobraba y se regresaba. No se quedaba mucho tiempo”, señaló la activista. “Iba y venía, iba y venía. Siempre trabajando. Lamentablemente pasó esto”.

Los familiares de Arcadio denunciaron lo sucedido a las autoridades de ambos países y creen que el crimen organizado está detrás de todo esto.

LA INFAME CARRETERA 43

“Ojalá entrara el FBI, porque es lo que necesitamos. Porque aquí no hay investigación, no hay nada. Queda en una denuncia y eso no se vale”, dijo la fundadora de Buscadoras por la Paz de Sonora, en referencia al trabajo de la fiscalía de Sonora.

De acuerdo con este colectivo, hace un par de años, 2 personas del Estado de México, que fueron a trabajar a Sonora, desaparecieron en ese mismo tramo.

La carretera 43, como también se le conoce, tiene una extensión de 140 kilómetros, que se recorren en aproximadamente dos horas.

Dicha vía pasa por Altar, un poblado conocido porque allí operan grupos de traficantes de personas, en contubernio con el narco. Allí venden todo tipo de aditamentos que se usan los migrantes para no ser detectados por la Patrulla Fronteriza, como ropa de camuflaje y calzado con suela de alfombra (para no dejar huellas en la tierra).

En varios tramos de la 43, el solitario desierto es el único paisaje. Llega hasta la fronteriza Nogales, que colinda con la ciudad de Arizona que lleva el mismo nombre. En toda esa región, de acuerdo con reportes, hay grupos criminales ligados al Cartel de Sinaloa.