PUEBLA. - Mario Marín Torres, exgobernador de Puebla, seguirá en prisión acusado de torturar a la periodista Lydia Cacho en 2005. Aunque la firma jurídica Abogados y Asociados José Luis Ramírez Téllez dijo que Torres obtuvo un amparo, en sus redes sociales Lydia Cacho aseguró que seguirá en la cárcel porque el Tercer Tribunal Colegiado de Cancún, Quintana Roo, sólo ordenó que se corrija un error encontrado en el documento de sentencia.
Este jueves se realizó una audiencia en Quintana Roo, las autoridades iban a fijar la sentencia contra el exmandatario; sin embargo, por un error procesal quedó revocada la negativa de amparo en contra del auto de formal prisión y la solicitud deberá ser sometida nuevamente a consideración del juez federal respectivo.
El proyecto del magistrado Leonel Jesús Hidalgo, con expediente 318/2021, fue aprobado por dos votos contra uno: ordena revocar la sentencia recurrida 205/2021 y reponer el proceso: el Tercer Tribunal Colegiado del Vigésimo séptimo Distrito "determinó que se debe corregir un error del documento de sentencia. Una vez corregido seguimos en el juicio. No sale de prisión y no fue exonerado", publicó Lydia Cacho en Twitter.
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El exgobernador fue detenido en febrero de 2021 en Acapulco, Guerrero, y en enero de este año fue trasladado a la cárcel de máxima seguridad en el Altiplano.
Caso Lydia Cacho
Marín Torres gobernó Puebla de 2005 a 2012. Es acusado de torturar a la periodista en diciembre de 2005: Lydia Cacho se encontraba en Cancún cuando policías la privaron de su libertad y la trasladaron de Cancún a Puebla en un viaje por carretera que duró más de 20 horas y en el que la periodista acusa haber sido torturada física y psicológicamente.
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En una grabación telefónica sostenida entre ambos se escucha cómo el empresario Kamel Nacif Borge agradece a Marín por haberla detenido y al entonces gobernador decir que le había dado “un coscorrón” a Lydia Cacho.
Cacho los acusa de secuestrarla para que se retractara de las acusaciones hechas en su libro “Los demonios del Edén”, en el que expone una red de pederastas ligada a empresarios y gobernantes, entre quienes ambos estaban.
Una juez de Distrito de Quintana Roo rechazó en febrero pasado conceder la prisión domiciliaria a Marín, quien había solicitado la medida para continuar su proceso fuera de la cárcel. La juez consideró que existe riesgo de que evada la justicia.